Chen Deming, titular de comcercio, indicó que el fondo de rescate establecido para ayudar a las naciones de la Unión Europea afectadas por la crisis y las ventas de bonos de esos países no resuelven el problema debido a que los fondos entregados tendrán que ser repagados con altos intereses.

Pekin. No hay una solución rápida a la crisis de deuda en Europa, y China debe estar alerta ante cualquier escalada del problema, especialmente en enero y febrero, dijo el Ministro de Comercio de China, Chen Deming, según citas difundidas el viernes.

Chen dijo que el fondo de rescate establecido para ayudar a las naciones de la Unión Europea (UE) afectadas por la crisis y las ventas de bonos de esos países no resuelven el problema debido a que los fondos entregados tendrán que ser repagados con altos intereses, según citó el Shanghai Securities News.

"Esas medidas sólo convierten una enfermedad grave en un mal crónico, y realmente es difícil decir si esos países que están en profundos problemas por la crisis de deuda podrán recuperarse en los próximos tres o cinco años", dijo Chen según se reportó.

Los comentarios de Chen fueron los más duros que han salido en el último tiempo desde China, que hasta el momento había declarado su apoyo a los esfuerzos de Europa para enfrentar sus problemas, en parte para proteger su inversión en el euro.

Pero comentarios vertidos previamente esta semana por Chen en discusiones comerciales entre la UE y China, donde instó a Europa a adoptar una acción más urgente pare resolver sus problemas, sugieren que la paciencia de China podría estar agotándose.

China ha invertido una porción no revelada de sus reservas de US$2.650 billones en el euro.

Un funcionario del ministerio de Relaciones Exteriores reiteró este jueves el apoyo de China a Europa, su mayor socio comercial, al decir que quería ayudar a la zona euro a regresar a la salud económica.

Un diario portugués dijo previamente esta semana que China está lista para comprar entre 4.000 y 5.000 millones de euros en deuda del Gobierno luso para blindarlo de las presiones de financiamiento. El banco central de China declinó comentar el reporte.

La presión de mercado sobre la salud fiscal de Portugal se ha intensificado en las semanas recientes debido a que los inversores temen que Lisboa podría necesitar un rescate después de Irlanda y Grecia.