El objetivo del programa es promover la competitividad e integración económica de las regiones peruanas mediante la reducción de los costes logísticos y la consolidación regional de carga.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha aprobado un crédito de US$ 300 millones para contribuir a mejorar la calidad de servicio de la infraestructura vial departamental en Perú, con un enfoque de resiliencia al cambio climático.
El objetivo del programa es promover la competitividad e integración económica de las regiones del país mediante la reducción de los costes logísticos y la consolidación regional de carga.
Los beneficiarios directos serán las principales cadenas productivas de exportación que utilizan las vías intervenidas y que habitan en distritos del área de influencia del programa que en conjunto representan una población de aproximadamente dos millones de habitantes.
La baja calidad de servicio de la infraestructura vial departamental genera deficiencias en el desempeño logístico de las cadenas de agroexportación cuyas áreas productivas se encuentran en el interior del país. La calidad de las carreteras, que es el aspecto con menor calificación en índices globales de competitividad y desempeño logístico en el país, reduce las posibilidades de mejorar la productividad en las cadenas agrícolas de exportación.
El crédito, aprobado por el órgano de direcicón del BID, mejorará la calidad del servicio en las rutas priorizadas con inversiones de mejora de la infraestructura vial, que incorporan la conservación y medidas de adaptación al cambio climático y accesibilidad universal.
El programa estima intervenir 2.300 kilómetros con obras de mejora. Asimismo, se implementarán acciones de conservación por niveles de servicio en 3.500 kilómetros de rutas departamentales, incluyendo, entre otras, las condiciones de tránsito, conservación de puentes, atención de emergencias viales, gestión e inventario de puentes, así como la gestión y control de pesos vehiculares.
En el programa se incorporan herramientas tecnológicas en los procesos de seguimiento, monitoreo y evaluación de impactos y el fortalecimiento de capacidades para la gestión integrada del transporte y la competitividad.