El país sudamericano registró una inflación de 20,6% y 13,2%, respectivamente, en enero y febrero de este año, contra un histórico 25,5% en diciembre, según cifras oficiales del Indec.

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Argentina anotó un alza del 11% en marzo, con lo que acumuló su tercer mes consecutivo con tendencia bajista, dijo el viernes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

El país sudamericano registró una inflación de 20,6% y 13,2%, respectivamente, en enero y febrero de este año, contra un histórico 25,5% en diciembre.

Por otra parte, el INDEC informó que el incremento minorista de precios en el primer trimestre del 2024 alcanzó un 51,6% y trepó al 287,9% en los últimos 12 meses.

El dato oficial estuvo por debajo a lo esperado por analistas que pronosticaban una mediana con alza del 12%, según un sondeo de Reuters.

El gobierno de Javier Milei se mantiene optimista con respecto a sus medidas para frenar una de las mayores tasas de inflación del mundo. Desde que asumió la presidencia en diciembre, se tomaron medidas de austeridad como la devaluación del peso argentino y el recorte del gasto público. Se trata de iniciativas que buscan revertir el profundo déficit fiscal, atraer inversión extranjera y moderar los precios.

"La inflación está disminuyendo rápidamente", escribió el Ministro de Economía, Luis Caputo, en X el miércoles.

Mientras tanto, la pobreza está aumentando y la actividad económica se ha estancado, agudizando las dificultades que sienten millones de personas. Los precios, desde comestibles hasta atención médica, siguen subiendo pronunciadamente, incluso en términos de dólares.

"No hay descenso en la inflación, son solo palabras", declaró María Gen, una ciudadana que compró recientemente frutas y verduras en un mercado en San Fernando, en las afueras de Buenos Aires, a principios de esta semana. "Aproveché venir al mercado pensando que los precios iban a ser más baratos y son igual de altos que en mi barrio", expresó la mujer para Reuters.

Cabe resaltar que según el Indec, la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) fue de 10,9% en marzo, mientras que la canasta básica total (CBT) fue de 11,9%. Esta última incluye no solo el mínimo de nutrientes que debe consumir un adulto de entre 30 y 60 años, sino también los bienes y servicios no alimentarios. 

En contraste a la crisis, analistas y economistas dicen que la inflación subyacente ha mostrado signos de disminución. Pero un 11% sigue siendo mucho más alto que el aumento de precios que la mayoría de los países ven en todo un año.

"La inflación está disminuyendo rápidamente, pero vienen aumentos en las tarifas (de servicios públicos) y eso evitará que caiga tanto como podría hacerlo", dijo el analista económico argentino Aldo Abram antes de los datos del viernes.

Sin embargo, el gobierno estaba "cortando de raíz" el riesgo de hiperinflación, agregó. El vocero presidencial Manuel Adorni dijo a los periodistas el jueves que el gobierno acabaría con la inflación, aunque era difícil decir cuán rápido.

"El fin de la inflación será una realidad", dijo. "¿Cuándo? Por supuesto que no lo sabemos, porque no tenemos una bola de cristal".