El Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó ayer una medición ampliada de la informalidad laboral en el país charrúa en la que agregó nuevas dimensiones.
La informalidad laboral en Uruguay fue del 22,7% en 2024, según una nueva medición del Instituto Nacional de Estadística (INE), presentada ayer. La informalidad fue mayor en los hombres (23,6%) que en las mujeres (21,6%) y a nivel del país, los tres departamentos con mayor tasa de ocupación informal fueron Artigas, Cerro Largo y Rivera, ubicados en la frontera norte.
Al evaluar los registros de los últimos tres años, se constató que 2024 fue el que tuvo una mayor tasa de informalidad laboral (22,7%) frente al registro de 2023 (22,4%) y de 2022 (21,9%).
A la tradicional medición sobre informalidad laboral —que hasta el momento comprendía únicamente a las personas ocupadas que no estaban registradas en el sistema de seguridad social—, ahora el INE incluyó también la situación de los asalariados privados que sí realizan aportes al sistema, pero no por la totalidad de sus ingresos y a todos los familiares no remunerados del hogar.
Por tanto, con la nueva medición ampliada, los trabajadores informales son: los trabajadores por cuenta propia o empleadores, dueños de una unidad económica informal (es decir, que no está registrada ante la seguridad social); todos los familiares no remunerados del hogar; los asalariados y contratistas dependientes que no aportan a la seguridad social; y los asalariados privados que si bien aportan al sistema previsional, no lo hacen por la totalidad de su salario.
Desde el INE explicaron que si bien la medición tradicional “es una buena aproximación” para evaluar el empleo informal en Uruguay, este cálculo ampliado —realizado en base a los datos de la Encuesta Continua de Hogares (ECH) de 2021— permite “enriquecer” el registro al incorporar nuevas dimensiones.
En ese sentido, con la medición ampliada, la tasa de ocupación informal fue un punto porcentual superior al registro tradicional ya que según esa nueva definición, en 2024 el 22,7% de los ocupados fueron informales a nivel del total del país, mientras que con la medida clásica de informalidad laboral, la tasa fue de 21,7%.
Al desglosar los datos por sexo, la informalidad laboral fue de 23,6% en los hombres y de 21,6% en las mujeres.
Si se miran las cifras por departamentos, Artigas, Cerro Largo y Rivera fueron los tres con mayores niveles de informalidad laboral registrados, con 48,8%, 45,5% y 39%, respectivamente.
De forma contraria, Montevideo, Flores y Colonia fueron los que presentaron la tasa más baja, con 14,4%, 16,9% y 21,5%, respectivamente.
LA INFORMALIDAD FUE MÁS ALTA ENTRE LOS TRABAJADORES POR CUENTA PROPIA
Cuando se analizan los datos del INE en función de la situación en la ocupación, la informalidad fue más alta entre los trabajadores por cuenta propia, ya que el 60,9% de estos son dueños de una unidad económica informal.
Desde el organismo indicaron que ese es “un comportamiento esperado” dado que “acceden a puestos de trabajo más inestables temporal y contractualmente”.
La informalidad es alta también entre los contratistas dependientes dado que un 46,5% de los trabajadores en esa situación son considerados informales.
De forma contraria, las tasas más bajas de ocupación informal se observaron entre los empleados (10,4%) y los empleadores (5,9%).
OFICIALES, OPERARIOS Y ARTESANOS: LAS OCUPACIONES CON MAYOR INFORMALIDAD
El informe del INE desglosó los datos de la informalidad laboral según los grandes grupos de ocupación y constató que el grado de informalidad desciende a medida que el nivel de cualificación del trabajo disminuye.
En ese sentido, constató que las ocupaciones con mayor informalidad fueron los oficiales, operarios y artesanos de artes mecánicas y de otros oficios, con un 43,4%; seguido por los agricultores y trabajadores calificados agropecuarios, forestales y pesqueros con una tasa de informalidad del 37,9%; y en tercer lugar, las ocupaciones elementales con 34,1%.