Esta evolución positiva estaría liderada por la aceleración del consumo privado y seguido por la inversión pública.
Para el segundo trimestre de este año en Perú se prevé una reactivación de la demanda interna, la cual crecería incluso a un ritmo superior al del PBI –superior al 2%-, proyectó el Scotiabank.
Esta evolución positiva estaría liderada por la aceleración del consumo privado -el empleo y los ingresos han seguido con su recuperación-, así como por la inversión pública -la ejecución de los gobiernos subnacionales ha sido mejor a la prevista a pesar de su curva de aprendizaje-, señaló el subgerente de Estudios Económicos de Scotiabank, Pablo Nano.
Refirió que la demanda interna cayó 1,4% durante el primer trimestre de este año, su primera evolución negativa en los últimos dos años.
Esta evolución se debió básicamente a la contracción de 12% de la inversión privada, en un contexto de deterioro de la confianza empresarial como resultado de las protestas sociales registradas a inicios de año, detalló.
Esto último, junto con los altos niveles de inflación, afectó también el consumo privado que registró su menor nivel de crecimiento desde la pandemia, agregó.
Expectativa
El Scotiabank también espera una menor caída de la inversión privada no minera para el segundo trimestre del año, pues el menor ruido político registrado desde marzo viene incidiendo en la recuperación de la confianza empresarial.
La inversión privada (-12%) registró su mayor caída en el primer trimestre del año desde el segundo trimestre del 2020, cuando la mayor parte de la actividad económica se vio paralizada temporalmente por el inicio de la pandemia.
Agregó que el consumo privado (0,7%) mostró una fuerte desaceleración, pues si bien continuó la recuperación del empleo y los ingresos -en particular en el sector formal-, esto fue limitado por los altos niveles de inflación -que afecta el poder adquisitivo de las personas- y las mayores tasas de interés -que viene influyendo en el menor ritmo de crecimiento de los créditos de consumo-.
Además, ya no se cuenta con la disponibilidad de ingresos extraordinarios (retiros de fondos de pensiones y depósitos CTS), que impulsaron el consumo durante el 2021 y 2022, mencionó.