La mayoría de los accidentes fueron causados por el mismo niño limpiándose las orejas (77%), seguido de lesiones que ocurrieron cuando un padre (16%) o un hermano (6%) lo hacía.
Mientras que los cotones de algodón se pueden utilizar para la limpieza del hogar, la artesanía y la aplicación de cosméticos, por desgracia también están causando heridas a los niños. Un estudio realizado por investigadores del Hospital Nacional de Niños descubrió que durante un período de 21 años entre 1990 y 2010, se estimó que 263.000 niños menores de 18 años de edad fueron tratados en los departamentos de emergencia de hospitales de EE.UU., o alrededor de 34 heridas diarias.
"Los dos conceptos erróneos más grandes que oigo como otorrinolaringólogo son que los canales del oído necesitan ser limpiados en el hogar, y que los cotones de algodón deben ser utilizados para limpiarlos, ambos de éstos son incorrectos," dijo Kris Jatana, autor del estudio del Departamento de Otorrinolaringología Pediátrica del Hospital Nacional de Niños y Profesor Asociado del Departamento de Otorrinolaringología del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio. "Los canales de las orejas suelen autolimpiarse. Utilizar aplicadores de punta de algodón para limpiar el conducto auditivo no sólo empuja la cera más cerca del tímpano, sino que existe un riesgo significativo de causar lesiones de menores a graves en el oído".
El estudio, publicado recientemente en The Journal of Pediatrics, encontró que la mayoría de las lesiones ocurrieron como resultado del uso de aplicadores de punta de algodón para limpiar las orejas (73%), jugando con aplicadores de punta de algodón (10%) o niños cayendo con el cotón de algodón en el oído (9%). La mayoría de las lesiones ocurrieron cuando el niño usaba el aplicador de punta de algodón por sí solo (77%), seguido de lesiones que ocurrieron cuando un padre (16%) o un hermano (6%) usaban el aplicador de punta de algodón para limpiar la oreja del niño. Aproximadamente dos de cada tres pacientes tenían menos de ocho años de edad, y los pacientes de 0 a 3 años representaban el 40% de todas las lesiones.
Las lesiones más frecuentes fueron sensación de cuerpo extraño (30%), perforación del tímpano (25%) y lesión de tejido blando (23%). La sensación de cuerpo extraño fue el diagnóstico más común entre los niños de 8-17 años, mientras que el tímpano perforado fue el más común entre los niños menores de 8 años de edad.
Casi todos los pacientes atendidos en los servicios de urgencias por estas lesiones (99%) fueron tratados y liberados. En los casos más graves, los daños al tímpano, los huesos de la audición o el oído interno pueden provocar mareos, problemas de equilibrio y pérdida auditiva irreversible.
"Aunque el número de lesiones totales de los aplicadores de punta de algodón disminuyó durante los 21 años que estudiamos en nuestro análisis, sigue siendo inaceptablemente altos", dijo el Dr. Jatana. "Estos productos pueden parecer inofensivos, pero este estudio muestra lo importante que es que no se utilicen para limpiar las orejas".
Los datos para este estudio se obtuvieron del Sistema Nacional de Vigilancia Electrónica de Lesiones (NEISS), que es operado por la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo de los Estados Unidos. La base de datos de NEISS proporciona información sobre lesiones relacionadas con los productos de consumo y relacionadas con el deporte y la recreación atendidas en los departamentos de emergencia de los hospitales de todo el país. Este estudio se llevó a cabo en colaboración entre el Departamento de Otorrinolaringología y el Centro de Investigación y Política de Lesiones en el Hospital Nacional de Niños.