Formar personas que se interesen en las tecnologías y el desarrollo de conocimiento en distintos niveles, que puede ser tanto la universidad como las carreras de pregrado, las carreras secundarias, las tecnicaturas, es crucial.
El proceso de creación-destrucción y nueva creación está en la esencia del espíritu del capitalismo, según la teoría marxista. Este ciclo se viene repitiendo a lo largo de la historia con las innovaciones tecnológicas y científicas como precursoras de los grandes cambios y creaciones.
Muchas de estas innovaciones mejoraron las capacidades productivas del hombre pero también trajeron nuevos desafíos en el plano laboral y educativo.
Según varios informes, entre ellos el “Reporte del futuro de los empleos” presentado en el Foro Económico Mundial de Davos, que analizan la evolución que se vienen dando en estos ámbitos, los acelerados avances traerán importantes consecuencias en el futuro: la transformación que hoy está al servicio del hombre comenzará a expandirse y de a poco comenzaría a reemplazar las tareas que actualmente lleva a cabo gran parte de la población.
Se estima que los progresos tecnológicos podrían eliminar 7,1 millones de puestos de trabajo y a la vez crear 2 millones de empleos en los próximos 5 años.
Gustavo Guaragna, CEO de Snoop Consulting y gurú tecnológico, aclara que los empleos no van a desaparecer completamente sino que el trabajo cambiará: “probablemente lo que ocurra no es que se termine el trabajo sino que termine el trabajo tal cual como lo concebimos hoy en día. Si pensamos un poco, buena parte del empleo de hoy en día para nuestros padres y nuestros abuelos sería el equivalente a no estar trabajando, porque ellos tienen una concepción un poco más industrialista, en la cual si vos no ibas a la fábrica o no ibas a la oficina probablemente no estuvieras trabajando. Seguramente cosas que hoy nosotros consideramos que es un juego, será trabajo de acá a 5 años”.
El experto agrega además que el 65% de los niños que hoy empiezan la primaria van a trabajar en empleos que aún no existen.
Siendo la tecnología y la informática las áreas de más crecimiento, la demanda de profesionales formados en estos campos se hace cada vez mayor. “La verdad es que tenemos mucha más demanda de mano de obra calificada en la industria del conocimiento, que la oferta para cubrirla. Esto no es sólo mérito de la argentina, es un problema común en todo el mundo”, revela Gustavo Guaragna.
Frente a este panorama la educación y capacitación de profesionales en áreas vinculadas con el conocimiento se hace fundamental: “Una de las cosas en las cuales estamos trabajando es encontrar la manera de capacitar futuros profesionales saliendo un poco del eje de la formación solamente universitaria. Y fundamentalmente con una mirada un poco más larga del horizonte coyuntural del 2016-2017 . Formar personas que se interesen en las tecnologías y el desarrollo de conocimiento en distintos niveles, que puede ser tanto la universidad como las carreras de pregrado, las carreras secundarias, las tecnicaturas”
En este escenario tan amplio y cambiante, Gustavo propone mirar más allá de las necesidades actuales y proyectar las necesidades que podrían tenerse en el futuro.
“La realidad es que hay oportunidades de empleo para todos los niveles y no solamente para la programación, la forma misma en que se construye software está cambiando muy rápidamente y esta es una industria que se reinventa a sí misma todos los años y en lo que tenemos que pensar es no sólo en lo que necesitamos hoy para cubrir las necesidades de tecnología, sino qué es lo que vamos a necesitar de acá a cuatro, cinco años. ¿Cuáles son las competencias que le vamos a pedir a la gente?”.
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