El país es el único de Centroamérica que no cerró el TLC con la nación asiática, en mayo del 2017.
Ante el temor de quedar aislado con un socio estratégico del continente asiático, Ricardo Arenas Menes, presidente de la Asociación Nacional de Caficultores (Anacafe), reitero la necesidad de que Guatemala sea parte del TLC entre Centroamérica y Corea del Sur.
El acuerdo fue negociado en bloque por los equipos de negociación de Centroamérica quienes cerraron los diferentes capítulos, pero al final Guatemala no cerró el TLC en mayo del 2017 y es el único país que no entrará en vigor.
“Confiamos que por medio del ministro de Economía, Acisclo Valladares Urruela, se alcance que Guatemala se adhiera al TLC lo antes posible, para no quedar en desventaja con los demás países Centroamericanos”, explicó el presidente de Anacafé.
Arenas Menes dijo que en general el mercado asiático representa el 23% de las exportaciones de café de Guatemala y los mercados como Japón, Corea del Sur, Taiwán y ahora la República Popular de China, son mercados que valoran la calidad del producto guatemalteco.
En ocasiones anteriores, el ministro Valladares Urruela ha mencionado que se están buscando las salidas para que Guatemala logre ser parte del TLC, fijando cláusulas de salvaguardia para determinados productos, sobre todo de la metalurgia.
El sector de metalurgia es uno de lo que se ha opuesto al TLC, mientras que otros sectores, sobre todo agroindustriales están solicitando la entrada en vigor.
Por aparte, Arenas Menes explicó que el comportamiento de precios a escala mundial del café está impactando a la caficultura local.
“Los costos de producción están siendo más altos que la comercialización a los clientes en el mercado internacional y eso está golpeando a los productores”, por lo que esperan por lo menos una recuperación para los siguientes meses.
El precio de referencia del saco de 60 kilos de café para entrega (promedio) en mayo fue de U$122 y para julio, en US$124. Además, para septiembre en US$126 y diciembre en US$130, respectivamente.
Otro impacto indirecto, dijo es la tasación del tipo de cambio. “En otros países productores los gobiernos están financiando y apoyando a los productores para el cambio del parque cafetalero, algo que no está ocurriendo en Guatemala”, lamentó.
Las exportaciones de café se situaron en US$649 millones y es uno de los principales 10 productos de venta al exterior en 2017.