Por Fabio Rodríguez, Senior director Database Business Development, Oracle Latin America Division.
En los últimos años los responsables de tecnología han vivido un proceso de transformación nunca antes visto, dejando de ser los “Guardianes de la información” para convertirse en verdaderos Líderes de la información, manejando ahora los datos como un activo real de la organización.
El CIO de hoy debe ser el líder en la era Digital, asegurando que la innovación sea un elemento básico en los cambios actuales que se requieren en las organizaciones para responder de manera rápida al mercado y a las necesidades del negocio.
En la actualidad vemos un cambio importante en los objetivos y la manera de abordar el rol del CIO, haciendo que los equipos de trabajo deban reformular sus prioridades y funciones. Hoy existen nuevas competencias que hace un tiempo ni siquiera tenían sentido, haciendo del cambio un proceso constante y cada día más fuerte, generando una visibilidad única en el CIO quien deja de ser parte de un área de apoyo, pasando a ser un generador de valor, entendiéndolo como algo único para cada organización, es decir, cada compañía lo define acorde con sus propias necesidades, convirtiéndose en un “Chief Innovation Officer”, cada vez dándole más el sentido a la letra “I” en su título hacia la Innovación.
En las organizaciones modernas áreas como marketing y finanzas ven en los responsables de Tecnología a las personas idóneas para apoyar sus requerimientos de negocio porque juegan un rol activo dejando de ser un área netamente operativa. Estrategias como contar con análisis en tiempo real de las redes sociales para entender a los clientes o poder acceder a información de diferentes fuentes que permiten tener una nueva visión de cualquier organización, han hecho del manejo adecuado de la información el eje de la operación en todas las industrias y del área de tecnología un grupo realmente responsable de la visión integral del negocio a través de la adopción de nuevas tecnologías y tendencias, y es acá en donde los CIOs pasan a ser los “Chief Innovation Officer”.
Aunque suena muy ambicioso, mediante un proceso continuo y completamente viable con las tecnologías hoy día existentes, es posible generar experiencias nuevas y de valor para los usuarios tanto internos como externos. Por ejemplo, hoy podemos evidenciar cambios en tipos de negocios como el que pasó la industria de la música la cual fue reinventada en unos pocos años; por otro lado, vemos muchas compañías de retail que ahora ofrecen también servicios financieros.
Pero, ¿cómo desarrollar un proceso innovador? Esto se da desde pequeñas acciones en el acceso a los datos, adopción de nuevas plataformas tecnológicas, hasta un cambio radical en los servicios ofrecidos a los clientes internos y externos. Para esto existen elementos claves sobre los que podemos trabajar y que abarcan un gran número de áreas que nos permiten cambiar tanto la manera de abordar las necesidades de negocio, el conocimiento de los clientes y los requerimientos técnicos que habilitan el cambio actual, generando un impacto constante en todas las organizaciones, permitiendo asi la innovación.
Las empresas deben comenzar a proveer metodologías y soluciones que permiten comenzar este cambio en el rol de CIO, ofreciendo elementos para todas las industrias y organizaciones, permitiendo que cada uno defina que significa valor en su rol y en su organización y defina un plan de trabajo constante y estructurado acorde con sus objetivos.