Científicos han llegado a la conclusión de que los eventos climáticos extremos provocan trastorno por estrés postraumático, y su efecto es peor cuanto más graves son las pérdidas económicas.
Un equipo internacional de científicos ha relacionado por primera vez la aparición de trastornos mentales en la población tras una inundación grave.
El equipo de investigación está conformado por profesionales del Área de Gestión Sanitaria Norte de Almería, liderado por Andrés Fontalba Navas, responsable de investigación, y de las universidades de Granada, Castilla la Mancha, Málaga y Cambridge.
Su trabajo, que publica la revista Public Health, recoge los resultados del proyecto realizado tras las graves inundaciones sufridas en la zona del Levante almeriense en septiembre de 2012, una zona que quedó seriamente afectada tras la tormenta.
El factor que más influeye sobre la aparición de trastorno por estrés postraumático es la pérdida económica, según este estudio
En primer lugar los investigadores realizaron un estudio de las precipitaciones extremas con ayuda de un sistema de información geográfica para el período de 1935 a 2012, que demostró que la de 2012 fue extremadamente alta.
Su objetivo era conocer la incidencia de síntomas de trastorno por estrés postraumático en la población expuesta a un evento extraordinario de lluvias torrenciales y una gran avenida en el año 2012, por lo que se entrevistaron a personas atendidas en la zona afectada por un equipo de médicos de Atención Primaria.
El trastorno por estrés postraumático surge como respuesta tardía o diferida a un acontecimiento estresante o a una situación de naturaleza excepcionalmente amenazante o catastrófica.
Trastornos que perduran después del desastre
Como comenta Andrés Fontalba, “la incidencia de los trastornos mentales después de la inundación se incrementa considerablemente. Estos trastornos pueden persistir mucho después de que haya pasado la inundación, lo que subraya la importancia de la planificación y de dar respuestas eficaces y oportunas en salud”.
El factor que tuvo una mayor influencia sobre la aparición de trastorno por estrés postraumático fue la pérdida económica relacionada con el desastre. Según indica Juan Pedro Arrebola, investigador de la Universidad de Granada y del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada, y coautor del trabajo, “este tipo de estudios son muy importantes para identificar colectivos especialmente vulnerables a los efectos de estas catástrofes, y contribuyen a establecer medidas preventivas más adecuadas”.