Desórdenes, peleas y lanzamiento de cosas durante la exhibición son sólo algunas de las situaciones que ocurren entre los adolescentes que asisten a ver la película. En varios lugares el filme ha salido de cartelera.
En reuniones de amigos es bastante habitual que ver una película de terror se preste para bromas, relajo y hasta uno que otro desorden.
El problema se intensifica si eso mismo se traslada a una sala de cine y las personas que protagonizan el "relajo" suman bastante más que el grupo de amigos en una casa.
Algo de eso está pasando en Francia con la película que protagoniza uno de los últimos éxitos del cine de terror: “Annabelle”. Son varias las salas en ciudades como París, Marsella y Montpellier cuyos dueños han decidido sacar la película de la parrilla, por los desórdenes que protagonizan los asistentes, en su gran mayoría pre-adolescentes entre 12 y 15 años.
La película gira en torno a una muñeca poseída que aterroriza a los miembros de una familia y en sus primeros días de exhibición en Francia ha sido vista por más de medio millón de espectadores.
Sin embargo, el fenómeno de audiencias desordenadas se está repitiendo en varios puntos del país. “La película atrae a jóvenes histéricos e incontrolables que se insultan en la sala, empujan a otros clientes y se pelean a la salida. Van más para causar problemas que para ver la película”, se queja el dueño de un cine.
El cuadro es repetido: en todos los casos los jóvenes lanzan palomitas, hablan durante la reproducción, no dejan de moverse, se forman grupos, se pelean, discuten. Han habido casos que, incluso, han llegado a sacar butacas.
Un crítico señala que para la audiencia extremadamente joven a la que se dirige la película "ir al cine es un momento para dejarse llevar, es vivir una experiencia más. Van a ver la película como una broma, como un pretexto para volverse locos”.
Se ha logrado establecer que los jóvenes se dan cita para ver el filme a través de las redes sociales. "Hemos visto fenómenos de desórdenes antes -explica el responsable del complejo de cines Les 3 Palmes- pero nunca algo como esto. Puede ser fácil manejar a 10 ó 15 jóvenes que arman lío, pero más complicado es actuar frente a centenares", señala.
Actualmente el letrero “Por motivo de incidentes, la película no será proyectada hasta nueva orden" se está haciendo habitual en varios locales franceses. Es el extraño efecto que está provocando la terrorífica “Annabelle”.