Daniel y Regina Salomón decidieron aprovechar el potencial de este mercado y fundaron Comaudi.
El cuidado de la salud es uno de los temas más importante para las personas, a pesar de ello, más de diez millones de mexicanos sufren de un problema que podría ser combatido al instante pero que sólo uno de cada 40 decide hacerlo.
La perdida auditiva es un malestar que afecta a una de cada tres personas mayores de 65 años, pero es minorizado por el poco interés destinado a su cuidado, señala el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR). No obstante, Daniel y Regina Salomón decidieron aprovechar el potencial de este mercado cuando en 1986 fundaron Comaudi, una empresa enfocada en la producción y venta de aparatos auditivos para tratar la sordera.
“La oportunidad de negocio llegó porque no había fabricantes de estos aparatos en México; así surgió esta empresa, al ofrecer la misma calidad de servicio que se ofrecía en Estados Unidos, Canadá y Europa, pero dentro del país”, señaló Jonathan Salomón, director de Comaudi.
La empresa tiene 25 años de experiencia en mejorar la calidad de vida de las personas que sufren pérdida de oído, pero también ayuda a combatirla mediante la comercialización de protectores y tratamientos auditivos.
Su línea de productos se fabrica en Estados Unidos, Suiza y Alemania, y está integrada por aparatos auditivos; protección contra ruido; barreras acústicas; control de ruido en industria y comercio; protección personal (orejeras, tapones, mascarillas); e instrumentos de medición (audiómetros, cabinas, espirómetros) los cuales son parte de su modelo de franquicia.
La empresa tiene una facturación anual de entre 18 y 20 millones de pesos con 20 empleados para realizar sus operaciones. Y sus productos se distribuyen a través de cadenas comerciales como Martí, Chedraui, Farmacias del Ahorro, Farmacias Benavides, Bodega Deportiva Max y están dirigidos a un mercado compuesto principalmente por adultos mayores.
“Las causas de una pérdida auditiva pueden ser por cuestión hereditaria, accidente, mal medicamento y la más común, la edad. El 90% de nuestros clientes son personas adultas, arriba de 55 años, el 5% son niños menos a los 4 ó 5 años que nacen con perdida auditiva, el 5% restante es la población en general”, apuntó Salomón.
Sucursales de la rehabilitación auditiva
Comaudi es miembro de la Asociación Mexicana de Franquicias y su modelo está dirigido a emprendedores, farmacias, consultorios y ópticas. Para obtener una sucursal es necesaria una cuota inicial de 230.000 pesos (15 mil dólares) y la inversión total ronda los 650.000 y 825.000 pesos (entre 44 mil y 56 mil dólares).
Para operar una franquicia sólo son necesarias dos personas: recepcionista y audioprotesista, quien es el encargado de realizar estudios, adaptaciones y ventas.
El retorno de inversión llega antes de dos años y medio, en caso de lograr ventas para gobierno (DIF, ISSSTE, IMSS, Secretarías de Salud) el tiempo de recuperación baja año y medio.