El software de esta nueva plataforma cubre la cadena de valor de inicio a fin, por lo que se pueden realizar en él procesos críticos de manufactura, administración, logística y distribución de vacunas.
Luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) reportara hace más de un año ya la existencia de múltiples casos de neumonía en Wuhan, China, que derivaron en el brote epidémico más agresivo de los últimos cincuenta años, el mundo se aferra con esperanza al proceso de inmunización contra el SARS- CoV-2, tras el desarrollo y aplicación de las primeras vacunas.
De hecho, 20 mil dosis aterrizaron en Chile el 24 de diciembre, iniciándose con ellas el programa gubernamental de inmunización que apunta a tener el 80% de la población ya inoculada a mediados del 2021.
Sin embargo, tal como lo han enunciado diversas autoridades sanitarias, la o las vacunas son el principio y no el fin de la lucha contra el COVID-19, puesto que el mayor reto será acortar una evidente brecha en la organización de la cadena de suministro, lo que ha generado una enorme presión sobre la industria farmacéutica y los gobiernos.
Para lograr que este insumo llegue a todas partes en el menor tiempo posible, será preciso alinear a fabricantes de vacunas, gobiernos, agencias regulatorias, proveedores de servicios y entidades distribuidoras de medicamentos, de tal manera de implementar un sistema de distribución conectado y eficiente.
Hoy, la oportunidad de unificar a todos los agentes involucrados en la cadena de suministro de esta vacuna la ofrece la tecnología, luego de que SAP desarrollara una nueva plataforma: el Centro de Colaboración de Vacunas de SAP (Vaccine Collaboration Hub, VCH). Esta es una herramienta que permitirá a las organizaciones y gobiernos, independientemente de su ubicación, administrar de mejor manera la distribución de este suero y así coordinar con la industria y otros actores, la exitosa implementación de programas de vacunación masiva.
“Está diseñado con el enfoque singular de salvaguardar la misión de inmunizar al mundo y proporciona la red crítica y las capacidades tecnológicas necesarias para respaldar eficazmente los programas de vacunación a gran escala y la distribución de medicamentos. Las autoridades federales, provinciales y estatales estarán habilitadas para monitorear el progreso de la distribución de vacunas y la ejecución de la estrategia de vacunación de un país, ayudando a dirigir y optimizar las distribuciones”, señala Mandar Paralkar, jefe de Life Sciences Industry de SAP.
El VCH de SAP cubre el proceso de vacunación de principio a fin, desde la fabricación hasta la distribución controlada, la administración y el seguimiento posterior a la inmunización. Proporciona la red crítica y las capacidades tecnológicas necesarias para respaldar los programas de vacunación y la distribución de medicamentos, al tiempo que crea la columna vertebral para colaborar en una mejor mitigación de emergencias futuras.
Según Paralkar, “la solución integra tres capas con distintas propuestas de valor, combinando varias soluciones SAP probadas: visibilidad y seguimiento de la cadena de valor para identificar cuellos de botella, evitar interrupciones y prevenir la falsificación y los lotes caducados; planificación de la cadena de suministro para integrar y optimizar la planificación de la red operativa y financiera y predecir la demanda para maximizar la administración de vacunas; y, safeguard mission para capturar y responder a métricas operativas en tiempo real y sentimientos de los ciudadanos”.
De esta manera, las autoridades de diferentes países que utilizan el software quedan en condiciones de supervisar el progreso de la distribución de vacunas y la ejecución de sus respectivos programas de inoculación, lo que contribuye a dirigir y optimizar la distribución del suministro.
“SAP se ha asociado con gobiernos, socios de ciencias biológicas y salud para construir una gran parte de las cadenas de valor de vacunación del mundo”, afirma Paralkar.
Hasta la fecha se desconoce de acuerdos formales que haya concretado la empresa con algún gobierno latinoamericano, aunque la empresa dice estar en conversaciones, con los gobiernos y otras organizaciones, para implementar la solución.
Las organizaciones y gobiernos que participen de esta iniciativa pueden tener una completa visibilidad de los volúmenes de producción de las vacunas COVID-19, distribuirlas de manera segura, utilizarlas bajo una garantía de integridad, que contemple el resguardo de la cadena de frío y la genuinidad del producto, evitar su manipulación inadecuada y falsificación, y mapear el ciclo de vida de una vacuna desde que se fabrica en el laboratorio hasta que llega al paciente.
Autoridades sanitarias pueden incluso modelar centralmente la disponibilidad planificada y el número de dosis despachadas a los puestos de vacunación en cada región del país, mientras los proveedores, basándose en estos datos, pueden organizar eficazmente la administración de las vacunas y reducir al mínimo el almacenamiento, estructurando así eficientemente la cadena de suministro.
El Centro de Colaboración de Vacunas busca ofrecer hoy la oportunidad de coordinar a los diversos actores involucrados en el ecosistema sanitario y con ello acelerar a nivel mundial el proceso de vacunación contra el coronavirus, en mayor objetivo humanitario común de las últimas décadas.