Las mujeres expuestas a imágenes de cuerpos delgadas perciben que su cuerpo es más grande y viceversa.
El estudio más grande sobre el tema acaba de comprobar que las mujeres tienen una peor autopercepción de su cuerpo después de mirar fotos de cuerpos extremadamente delgados.
En la fila del supermercado, en el consultorio del médico de turno, en la peluquería, es normal ver a mujeres pasar las páginas de revistas de moda y farándula repletas con los cuerpos delgados de famosas y modelos. El hábito, al parecer inofensivo, podría ser perjudicial para la autopercepción de las mujeres, de acuerdo con un estudio realizado por científicos de diversas universidades en el Reino Unido.
De acuerdo con la investigación, publicada en la revista Royal Society Open Science, las mujeres tienen una peor opinión de su cuerpo tras exponerse a imágenes de cuerpos extremadamente delgados. Para llegar a esta conclusión, los investigadores reunieron a 200 mujeres que tuvieran entre 19 y 25 años y un peso saludable, casi seis veces más participantes que otras investigaciones previas sobre el tema. A las mujeres no se les dijo cuál era el tema de la investigación en la que estaban participando, para que sus opiniones no estuvieran viciadas.
Antes de asistir a la cita que les pusieron los investigadores en la Universidad de Bristol, las mujeres debían llenar una encuesta sobre su nivel de satisfacción corporal. En las pruebas presenciales, las participantes fueron expuestas a imágenes de cuerpos por debajo del peso saludable, con peso saludable y con sobrepeso. Lo que las participantes no sabían que todas las imágenes eran la foto de una mujer, alterada digitalmente para parecer con bajo peso o con sobrepeso.
Tras mirar las imágenes, los investigadores le pidieron a las jóvenes que se quitaran los abrigos, se miraran a un espejo y respondieran preguntas sobre su autopercepción corporal y la talla a la que creían pertenecer.
El equipo de investigadores, liderados por la profesora Helen Bould, del departamento de Psiquiatría de la Universidad de Oxford, confirmó lo que otros estudios más pequeños ya habían señalado: que aquellas mujeres expuestas a imágenes de cuerpos delgadas percibían que su cuerpo era más grande; mientras que aquellas que vieron imágenes con mujeres con sobrepeso ligero, sintieron que sus cuerpos eran más pequeños.
Los efectos fueron más pronunciados tras ver imágenes de mujeres con peso normal y sobrepeso. De hecho, las mujeres reportaron sentirse un 9 % más satisfechas con su cuerpo tras ver ese tipo de imágenes, comparado con la satisfacción que revelaron en el test que llenaron antes de entrar a la sala del estudio. Estas sensaciones se extendieron durante las 24 horas siguientes, reveló el informe.
Además, los investigadores se encontraron con que los resultados eran mucho más fuertes para aquellas participantes que entraron a la sala con una alta insatisfacción corporal.
“Nuestros hallazgos son importantes si tenemos en cuenta el actual ambiente mediático, en el que las mujeres se ven expuestas a imágenes de cuerpos con bajo peso constantemente (…) El estudio sugiere que promover una representación de mujeres de talla normal en los grandes medios sería bueno para que las mujeres se sientan más positivas respecto a su propia talla: esto podría reducir los niveles de insatisfacción corporal, uno de los principales factores de riesgo para los desórdenes alimenticios”, concluye el artículo.
El estudio concluyó que incluir a mujeres con cuerpos más cercanos al peso saludable puede verse como una estrategia de salud pública que podría prevenir la aparición de desórdenes alimenticios. Además, sugirió que investigaciones futuras profundicen respecto a si este tipo de intervenciones podrían tener efectos en pacientes con desórdenes alimenticios diagnosticados.