La resistencia del sector de servicios, que representa más de la mitad del PIB chino, es clave para contrarrestar la desaceleración en curso en el sector manufacturero.
El expansivo sector de servicios de China mantuvo un sólido ritmo de expansión en enero, aunque el crecimiento se moderó ligeramente, mostró una encuesta privada el domingo, ofreciendo apoyo continuado a la segunda economía más grande del mundo a medida que la industria se desacelera.
El índice de gerentes de compras (PMI) de los servicios Caixin/Markit cayó levemente a 53,6 en enero desde 53,9 en diciembre, pero todavía muy por encima de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
Las ventas en el extranjero continuaron apoyando al sector, con nuevas exportaciones que crecieron al ritmo más rápido en más de un año, gracias a los esfuerzos de las empresas de servicios chinas para atraer clientes extranjeros. Los nuevos pedidos también aumentaron, a 52,6 desde 52,3 en diciembre.
La resistencia del sector de servicios, que representa más de la mitad del producto interior bruto de China, es clave para contrarrestar la desaceleración en curso en el sector manufacturero.
Las fábricas chinas se han visto afectadas por una reestructuración a largo plazo de las industrias, el combate contra la contaminación y las tensiones comerciales de China con los Estados Unidos.
"En general, el crecimiento económico de China se vio afectado por el debilitamiento de la demanda interna en enero, aunque las exportaciones mejoraron ligeramente a medida que las negociaciones comerciales chino-estadounidenses indicaban signos de progreso", dijo Zhong Zhengsheng, director de análisis macroeconómico del Grupo CEBM.
Las políticas de China para apoyar la demanda interna y los acontecimientos en la guerra comercial "seguirán siendo clave para las perspectivas de la economía china. Dado que el gobierno se ha abstenido de adoptar políticas de estímulo fuerte, la tendencia a la baja de la economía puede ser difícil de cambiar por el momento", dijo Zhong.
El PMI compuesto de manufacturas y servicios de Caixin, también publicado el domingo, cayó a 50,9 en enero desde 52,2 en diciembre. El PMI manufacturero de enero, anunciado el viernes, fue de 48,3, el más bajo desde febrero de 2016.
Pekín ha tomado una serie de medidas en el último año para alentar el crecimiento: reducir los niveles de efectivo que los bancos deben mantener como reservas para estimular los préstamos, reducir los impuestos y tasas y acelerar el gasto en infraestructuras.
Pero resolver las tensiones comerciales con los Estados Unidos sigue siendo clave para mejorar la confianza y elevar las perspectivas para los exportadores chinos.
Para ilustrar cómo el sector de servicios de China se está resistiendo, las empresas de servicios aumentaron también sus nóminas en enero. Las presiones inflacionistas disminuyeron, con los costes operativos y los cargos de producción aumentando a un ritmo más lento.
Las lecturas optimistas de Caixin para los servicios fueron consistentes con una encuesta oficial publicada el jueves que mostró que la industria repuntó por segundo mes consecutivo en enero.