Pasar al contenido principal

ES / EN

El silencioso pero atractivo regreso de la hija de Michael Jackson
Domingo, Septiembre 27, 2015 - 11:53

Ya recuperada de una fuerte depresión, Paris Jackson busca nuevamente su espacio en los medios.

Apartada de los focos mediáticos después de su intento de suicidio el año 2013, la atractiva joven se muestra recuperada y ha querido retomar su actividad en las redes sociales.
 
El 5 de junio de 2013, la adolescente intentó suicidarse ingiriendo el medicamento Motrin y cortándose su muñeca con un cuchillo de carnicero, dejando tras de sí una nota de suicidio.
 
Gracias a un intenso y efectivo tratamiento terapéutico en la Academia Diamond Ranch, en Utah, la hija del astro de la música mundial viene por su espacio en los medios y en el espectáculo.
De a poco, por ejemplo, desarrolla una permanente presencia en Instagram, espacio virtual en el que cotidianamente comparte fotos con sus más de 35.000 seguidores con los que cuenta hasta ahora.
 
Con 17 años, Paris Jackson es una atractiva adolescente con una fuerte carga hereditaria que intenta llevar una vida normal, pero que responda en parte a las expectativas que hay sobre ella.
 
La única mujer en el trío de hijos de El Rey del Pop no parece interesada en formar parte del mundo de la fama, sin embargo, su nueva actitud feliz y sonriente puede ser señales de estar en la búsqueda de su destino y las redes sociales bien pueden ser el comienzo de algo. 
París es fruto de la relación de Michael Jackson y Deborah Rowe. Tiene un hermano mayor Michael Joseph Jackson Jr. y un medio hermano menor Prince Michael Jackson II. Nació el 3 de abril de 1998, en Los Angeles, California. 
 
Lleva el nombre de la ciudad francesa porque allí habría sido concebida, según antecedentes que han comentado algunos de sus familiares. Fue criada únicamente por el cantante, quien recibió los derechos de custodia completos después de su divorcio en 1999 con Rowe. Se crió  en el rancho Neverland con sus hermanos.
 
Durante su infancia, frecuentemente durante las salidas públicas con su padre, ella y sus hermanos llevaban máscaras para ocultar sus rostros del público. Tras la muerte del cantante en 2009, su abuela Katherine se hizo la tutora permanente de ella y sus hermanos, mientras que Rowe obtuvo derechos de visita.
La jovencita está casi irreconocible en comparación con las imágenes de su infancia, cuando encaró al mundo como una pequeña de sólo 11 años al morir su padre. Luego fue objeto de un intenso escrutinio cuando atentó contra su vida.
 
Teniendo que mantener un bajo perfil en años recientes, la atractiva joven se convierte rápidamente en una estrella de las redes sociales y en la reina de las selfies, lo que puede ser el comienzo de una gran historia.
 

Autores

LifeStyle