De acuerdo con el Inegi, 57.6% de los mexicanos de 18 años no realiza actividad física alguna. Las empresas tienen también el gran reto de motivar a sus colaboradores.

Cada día son más las voces en todo el mundo que promueven el deporte como el complemento ideal para fortalecer la salud y aumentar la productividad.

Sin embargo, en México parece ser que caminamos en sentido contrario, pues a pesar de los esfuerzos de las empresas y del sector público para que los mexicanos hagan más ejercicio físico, somos uno de los países con más sedentarismo.

Un estudio conjunto de la revista médica Lancet y la Organización Mundial de la Salud (OMS), dio a conocer que el 25% de la población mundial se encuentra en riesgo de contraer de enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer de colon y de pecho por el sedentarismo.

Según esta investigación, 1.400 millones de personas alrededor del mundo son sedentarias y los más altos niveles se presentaron en las mujeres de América Latina y el Caribe, con 43% de inactividad física. Los datos vienen de entrevistas a casi dos millones de personas de 168 países.

Desde luego, México está muy por encima de ese promedio, pues de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 57.6% de los mexicanos de 18 años y más (21.425.450 personas) no realiza actividad física alguna.

Lo más grave es que la cifra no sólo no se ha reducido sino que ha aumentado, pues en el mismo estudio del Inegi, el Módulo de Práctica Deportiva y Ejercicio Físico (Mopradef) reveló en 2014 que el porcentaje de sedentarismo se ubicaba en 56.4% y en cuatro años subió 1.2 puntos porcentuales.

Para colmo, de quienes sí realizan deporte, solamente 49.1% lo hizo en un nivel suficiente, es decir al menos tres días a la semana, con un tiempo mínimo de 75 minutos con una intensidad vigorosa o 150 minutos con intensidad moderada. Esto significa, en términos generales, que tres de cada cuatro mexicanos son sedentarios o hacen ejercicio físico de manera insuficiente.

Del Mopradef hay varios puntos que destacan. Uno de ellos es que las tres razones principales por las cuales la población abandona la práctica deportiva o el ejercicio físico son falta de tiempo, con el 47.3%; cansancio por el trabajo, 24.3%, y por problemas de salud, 16.5%.

Otra conclusión interesante es que a mayor nivel educativo se incrementa el porcentaje de población que declaró realizar práctica físico-deportiva. Sobresale que entre la población que no ha concluido su educación básica la proporción de activos físicamente es de solo 27.6%.

Trabajadores hasta 300% más eficientes

Son muchos los estudios y los ejemplos que señalan la importancia del deporte para aumentar la productividad. A continuación, algunas síntesis de esas investigaciones. La firma Gympass encontró que practicar ejercicio físico, un máximo de cuatro días a la semana, aumenta la productividad del individuo ¡hasta 300%!

El mismo estudio indica que las empresas que promueven el ejercicio físico entre sus empleados reducen hasta 30% las bajas laborales de su personal, y hasta 20% los accidentes de trabajo y los gastos médicos de sus trabajadores.

Los países nórdicos están considerados con los más altos niveles de calidad de vida en el mundo. Al respecto, empresas suecas como Kalmar Vatten o la marca de ropa Björn Borg, incluyen una hora de deporte semanal en sus contratos laborales.

Las universidades de Briston y Metropolitana de Leeds, en el Reino Unido, encontraron que hacer ejercicio por media hora mejora el estado de ánimo, ayuda a aliviar el estrés, reducir los niveles de agresividad y angustia. También mejora la eficiencia y concentración.

En este trabajo se estudiaron los hábitos y actividades laborales de 201 personas, para analizar la productividad laboral basada en el ejercicio y se demostró que los empleados que se ejercitan al menos 30 minutos al día son más eficientes.

Los Estudios de Salud de las Enfermeras de Estados Unidos desde 1976 han monitoreado hábitos y han encontrado asociaciones entre la actividad física y menor riesgo de cáncer de mama, disminución de grasa abdominal y una reducción en el riesgo de desarrollar diabetes.

Estos son sólo algunos ejemplos de cómo la práctica deportiva ayuda a mejorar el capital humano de una empresa, pero hay otros más especializados que indican que hacer ejercicio facilita además la neurotransmisión de la noradrenalina, serotonina y dopamina, lo que mejora el estado de ánimo y brinda una sensación de bienestar.

Recomendaciones del INSP

Así como se han realizado a nivel global las investigaciones antes mencionadas, el Instituto Nacional de Salud Pública de México (INSP), considera que los adultos deben practicar al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada, o 75 minutos semanales de actividad física intensa o una combinación de ambas, para tener una vida saludable.

Concretamente este instituto mexicano ha diseñado una guía para ejercitarse, en la que se señalan las siguientes acciones para los adultos y los trabajadores:

• Realizar en sesiones de actividades físicas de 10 minutos continuos, como mínimo.
• La actividad física puede consistir desde paseos a pie o en bicicleta, hasta deportes o ejercicios programados en el contexto de las actividades diarias, familiares y comunitarias.
• Es necesario realizar actividades de fortalecimiento de los músculos dos o más veces por semana.
• Integrar la actividad física a la rutina diaria.
• No permanecer sentado durante mucho tiempo, pues puede tener consecuencias negativas para la salud.
• Es posible interrumpir las actividades sedentarias al menos cada dos horas, al ponerse de pie y caminar unos minutos.

¿Qué pueden hacer las empresas?

Como se señala en párrafos anteriores, el deporte y la actividad física de los trabajadores ayuda a aumentar su productividad, lo que significa un beneficio directo para las empresas que pueden tener empleados más saludables, más contentos y, por consiguiente, más eficaces.

Por eso, presentamos algunas ideas para mejorar la productividad a través del deporte:

• La promoción del deporte entre los trabajadores no es un gasto sino una inversión.
• Propiciar la autoestima de los trabajadores a través del deporte mejora las relaciones en el ámbito laboral y ayuda a liberar tensiones.
• Promover los deportes en grupo favorece la empatía y ayuda a los trabajadores a realizar proyectos en equipo.
• Buscar asociaciones con clubes deportivos para que los trabajadores puedan acudir sin merma económica para ellos.
• Negociar los trabajadores tiempos específicos para ejercitar el cuerpo y evitar el sedentarismo.
• Si es posible, acondicionar un espacio físico para que los empleados puedan hacer ejercicios rutinarios.
• Promover que un especialista en ejercicios o deportes acuda una vez a la semana a sesiones con empleados.
• Negociar con los trabajadores que la práctica deportiva y el ejercicio puedan ser parte de las prestaciones laborales.

Con un pequeño esfuerzo de gobierno, empresas y trabajadores, México podría, en un futuro, eliminar el deshonroso liderazgo mundial en sedentarismo.

FOTO: PIXABAY.COM