El fortalecimiento de las empresas extranjeras está demandando profesionales en desarrollo de softwares, ciencias agrarias y mercados internacionales.
Los cerca de 59.937 profesionales colombianos que decidieron especializarse en 2013 lo hicieron motivados por ampliar su currículo y fortalecer sus competencias para tener un mejor desempeño profesional. Pero muy pocos eligieron el programa pensando en las necesidades del país.
Carlos Hernando Forero, director de la Asociación Colombiana de Universidades (Ascún), explica que esto se debe a que “hoy los jóvenes siguen apostando por la administración, las ciencias sociales y en menor grado la ciencias de la salud”.
Una demanda que podría estar cambiando por cuenta del crecimiento de actividades y negocios que requieren del desarrollo de softwares y la entrada en vigencia de intercambios comerciales que demandan profesionales con conocimientos no sólo de negocios sino agropecuarios.
“Se están necesitando más genios tecnológicos capaces de ocupar las vacantes de las empresas extranjeras que ingresan al mercado, especialistas en ciencias agrarias que conozcan el campo y sus cuidados, y profesionales que entiendan la importancia del mercado nacional en el mundo”, advierte Forero.
Esta escases podría deberse a que desde hace algunos años el país ha estado rezagado en ciencias básicas como matemáticas, física, química y biología, como consecuencia de “unos patrones que ha establecido la sociedad, en los que se cree que estas áreas son el coco, que son muy difíciles y solo tienen salida en el campo pedagógico”.
La solución que propone este académico es crear desde las aulas metodologías que hagan más amigable su aprendizaje y adelantar un trabajo con las empresas para que las valoricen.
Con el fin de garantizar una sintonía entre las especializaciones que eligen los colombianos y la demanda del mercado, el Consejo Privado de Competitividad empezará a analizar las necesidades del mundo empresarial desde nuevas áreas productivas.
Esto implica incluir lo que está pasando en las regiones, donde las brechas de talento humano son más visibles. “En los últimos años Colombia ha crecido en muchos campos, despertando el interés de multinacionales y empresarios que han decidido apostarle al país y debemos, concluye Forero, responder a esta demanda también desde la educación”.