Para Fernando Esteves, director de Ediciones SM en México, las editoriales tienen el reto de actuar como mediadores y ayudar a que los maestros que no son nativos digitales puedan familiarizarse con nuevas herramientas.
El sector editorial afronta una reconversión que viene de la mano de la irrupción de nuevas herramientas en las aulas y del hecho "inédito" de que en el aspecto tecnológico "el alumno sepa más que el educador", señaló Fernando Esteves, director de Ediciones SM en México.
"Cada chico es distinto, y hasta ahora la educación no lo había entendido así", expresó en una entrevista con Efe el ejecutivo de la editorial española, especializada en materiales educativos y que celebra su 20 aniversario en este país.
Citando las ideas del experto británico Richard Gerver, opinó que "no se pueden utilizar estrategias propias de maestros del siglo XX con aulas del siglo XIX y alumnos del siglo XXI", por lo que abogó por un sistema de aprendizaje "circular" y adaptado a cada alumno.
"Antes el modelo, el sistema y los propios libros eran comunes a todos, sin contemplar las diferencias que podría haber entre los chicos; pero hoy en día se puede recurrir a herramientas que son incipientes y que permiten un aprendizaje más personalizado", argumentó.
Frente a las clases magistrales y la visión del profesor como única fuente de información, las nuevas tendencias señalan que la experiencia educativa consistirá en que el maestro proponga recursos y temas y los alumnos realicen trabajos de investigación grupales, que tendrán un "feedback" en la clase.
Por ello, las editoriales tienen el reto de actuar como mediadores y ayudar a que los maestros que no son nativos digitales puedan familiarizarse con nuevas herramientas y sacar el máximo provecho de ellas, teniendo siempre en cuenta que la tecnología es simplemente "un medio".
"Esto implica no sólo que las editoriales enriquezcan la oferta, sino que haya un acompañamiento posterior que el papel no demandaba", destacó.
Esteves afirmó ser consciente de que la escuela es una de las instituciones de la sociedad que demandan más tiempo para cambiar, y que hay obstáculos como que "la mayoría de maestros de Latinoamérica y México ven la introducción de tecnología en el aula con mucho recelo".
De acuerdo con el ejecutivo, ello cambiará cuando se produzca un relevo generacional.
Otro reto para la educación mexicana debería ser un "alto nivel de exigencia docente, que es el eje del sistema", ya que "puedes tener condiciones muy favorables, computadoras, libros, pero si el maestro no es bueno, no sirve nada".
Además, Esteves criticó la carencia de políticas educativas sostenidas en el tiempo: "En América Latina no hay país que cuando cambia el Gobierno no haya una reforma educativa, y la pregunta que me hago es ¿atacaron el problema de fondo? Pareciera que no".
El papel, a su entender, no quedará fuera del ámbito escolar, sustituido por elementos como las tabletas; la clave será determinar qué soporte es mejor para cada ocasión o cómo combinarlos.
"Los especialistas dicen que para ciertas habilidades cognitivas y motrices el uso del papel en los primeros grados de escolarización no es sustituible", enfatizó.
Su editorial contempla, para marzo próximo, celebrar su VIII Seminario Internacional de Educación Integral, que girará en torno a la creatividad unida al pensamiento.
Se trata de un aspecto que, a su entender, tiene especial relevancia, ya que actualmente "muchas profesiones ya no van a existir cuando los alumnos egresen, por lo que una de las cuestiones básicas es justamente que sean creativos".
"Ahora se trata de que los alumnos aprendan a pensar", concluyó.