En un experimento con ratones, investigadores de la Universidad de Duke lograron enviar las células cancerígenas al torrente sanguíneo.
Xinhua. Investigadores de Estados Unidos informaron sobre una terapia potencial contra el cáncer de mama que podría evitar la reaparición de la enfermedad y detener su diseminación a los huesos.
En un estudio publicado en la revista estadounidense Science Translational Medicine, investigadores de la Universidad de Duke describieron dos proteínas que las células del cáncer de mama utilizan para invadir la médula ósea de ratones, en donde estas células pueden permanecer latentes durante años para escapar de la quimioterapia o de las terapias hormonales.
Los experimentos con ratones mostraron que utilizar medicamentos que bloquean las dos proteínas no sólo puede evitar que las células del cáncer de mama entren a la médula ósea, sino que también pueden sacar estas células hacia el torrente sanguíneo, donde pueden ser destruidas.
"Los estudios clínicos encontraron que el cáncer de mama puede ser detectado a tiempo y tratado y que los pacientes pueden no tener ningún indicio de la enfermedad", dijo la autora del estudio Dorothy Sipkins, profesora asociada de la división de Malignidades Hematológicas y Terapia Celular de la Universidad de Duke.
"Y luego cinco, diez o quince años más tarde, el paciente puede recaer. Lo más frecuente es que el cáncer haga metástasis en el hueso", añadió Sipkins.
En el nuevo estudio, Sipkins y sus colegas identificaron dos proteínas llamadas E-selectin y CXCR4 de vasos sanguíneos específicos en la médula ósea. La E-selectin permite a las células cancerígenas entrar a la médula ósea y la CXCR4 ancla las células al hueso.
Tratar a los ratones con un inhibidor de E-selectin bloqueó con éxito la entrada de las células del cáncer de mama al hueso y el inhibidor de CXCR4 las obligó a regresar al torrente sanguíneo, en donde pueden ser aniquiladas con mayor facilidad con quimioterapia o terapia hormonal.
"Nuestros hallazgos podrían ofrecer nuevas estrategias para intervenir a nivel molecular antes de que las células latentes puedan afianzarse y causar una recaída", dijo Sipkins.
"Esperamos seguir adelante con estudios adicionales en ratones para entender mejor nuestro enfoque antes de continuar con los estudios en seres humanos", añadió.