Hoy en día, el mercado laboral requiere profesionales capaces de jugar diferentes roles al mismo tiempo dentro de la organización pero además, estar especializado en procesos clave.
En la empresa actual se lucha constantemente en mantener el equilibrio entre la polivalencia y la especialización. La primera reduce el número de personas que son imprescindibles y aumenta el rendimiento. La especialización en cambio, mejora el producto y su valor agregado. “El problema es que no es tan fácil encontrar profesionales especializados en un área, que a la vez sean polivalentes y que además encajen perfectamente en los procesos y cultura de cada empresa. Muchas veces, se deben formar internamente, lo que significa un costo en horas-hombre para la planificación, la ejecución y la posterior evaluación, sin contar la resistencia que pueda generarse entre el personal o los sindicatos”, explicó Hugo Álvarez Business manager de ILC Group.
En el otro extremo se encuentra la especialización, cuya ventaja es que se puede profundizar más aunque en un ámbito menor, lo que entrega un valor agregado en la innovación y en la calidad de los productos entregados. El inconveniente es que se depende de cada especialista, porque es imprescindible para una etapa clave del proceso. “Cuanto mayor especialización haya, mayor será el número de personas únicas que realizan una serie de tareas específicas en las que no hay nadie más con la formación y entrenamiento necesarios lo que en algunas ocasiones arriesga la rentabilidad de la propia actividad industrial o incluso la salud del mismo trabajador que verá que muchos procesos dependen de él solamente, causándole mucho estrés”, enfatizó el ejecutivo.
En Chile, la dualidad polivalencia-especialidad es cada vez más notoria. Álvarez explica que “como ILC Group, hemos constatado que las empresas necesitan personas que sean polivalentes y especializadas, que puedan manejarse muy bien en su formación de base, pero también en otras áreas, tales como legal, comercial, ventas y gestión”, recomendó Hugo Álvarez agregando.
Como consejo a los profesionales que desean crecer, el directivo recomienda analizarlo bien. “No siempre el mejor camino es ahondar en una materia específica, dado que la especialización está inversamente relacionada con el campo laboral, en donde si bien un profesional adquiere más valor como “producto profesional”, su campo laboral se va reduciendo proporcionalmente. Es decir que, mientras más se especializa un profesional en una materia determinada, por un lado aumentará su valor de mercado, pero a la vez su campo laboral se verá reducido por la especialización que ha adquirido. A modo de ejemplo, la percepción de las empresas es diferente entre un ingeniero civil industrial recién titulado al mismo ingeniero con magíster en finanzas, dado que el segundo será acotado a cargos relacionados con dicha materia”, concluyó Álvarez.
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