Esta es una de las interrogantes que más escuchan los médicos, pues lo cierto es que a prácticamente a nadie le gusta utilizarlos, ya sea por asco o por temor a contraer algún padecimiento.
Esta es una de las interrogantes que más escuchan los médicos, pues lo cierto es que a prácticamente a nadie le gusta utilizar un baño público, ya sea por asco o por temor a contraer alguna enfermedad.
De hecho, muchas personas evitan estos baños pues les da temor contagiarse de gonorrea, clamidia o sifilis. Sin embargo, no podrían estar más equivocados.
Así lo explicó al portal inglés Indy100, Preethi Daniel, médico del Servicio de Salud de Inglaterra. Según el profesional, para contraer estas enfermedades, los gérmenes tendrían que ser directamente transferidos desde la cubierta de la taza al tracto genital, o a través de una herida abierta en las piernas o las nalgas.
De hecho, afirma que es más probable ser golpeado por un rayo que contagiarse de una enfermedad de transmisión sexual a través de un baño público, pues los únicos males que tal vez podrían contraerse allí son Salmonella y Escherichia coli , los que son fácilmente evitales ( revisar recuadro).
Pero aunque los asientos no representen un peligro grave, hay otras cosas con las que sí debemos tener cuidado. Una de ellas es que en nuestro intento por no tocar la taza del baño, no liberamos toda la orina, lo que podría conducirnos a una infección segura, según explica Daniel.
Asimismo, el piso del baño es uno de los lugares con más gérmenes, por lo que es vital evitar que nuestra ropa toque el lugar.
El médico también entrega algunas recomendaciones:
-Mantén una buena higiene
-Lava tus manos después de usar el baño
-Lleva un pequeño jabón antibacterial si quieres una extra protección
-Cubre la taza del baño con papel o utiliza toallitas desinfectantes antes de sentarte allí.