Las medidas de reducción de impuestos en Sao Paulo y Minas Gerais se toman en un contexto de inflación de dos dígitos impulsada por los altos precios de la energía y en un intento por hacer que el biocombustible sea más competitivo.
Los gobiernos de Sao Paulo y Minas Gerais, los dos estados más poblados de Brasil, anunciaron este lunes recortes al impuesto ICMS que grava el etanol, en un intento por hacer que el biocombustible sea más competitivo en los surtidores tras una reducción similar del impuesto sobre la gasolina.
Sao Paulo redujo el impuesto ICMS, similar al IVA, sobre el etanol al 9,57% desde el 13,3%, mientras que Minas Gerais lo redujo al 9% desde el 16%.
Las medidas de reducción de impuestos se toman en un contexto de inflación de dos dígitos impulsada por los altos precios de la energía antes de las elecciones de octubre.
El gobernador de Sao Paulo, Rodrigo García, y el de Minas Gerais, Romeu Zema, se presentarán a la reelección, al igual que el presidente Jair Bolsonaro.
García dijo en un comunicado que espera que la medida reduzca los precios del etanol en Sao Paulo en unos 0,17 reales (US$ 0,0314) por litro.
El biocombustible compite con la gasolina en los surtidores de Brasil, donde la mayor parte del parque automovilístico puede funcionar con etanol debido a los motores flexibles. El biocombustible también se mezcla con la gasolina en el país sudamericano.
Ambos estados habían recortado previamente el impuesto ICMS que grava la gasolina en virtud de una ley federal que limita la cantidad con que los estados pueden gravar la energía y algunos servicios.
El impacto fiscal de la última medida de Sao Paulo se estimó en 563 millones de reales a finales de este año. El estado es el mayor mercado de combustible de Brasil.