Entre las piezas recuperadas se encuentran un mosaico, jarrones, ánforas, monedas, libros y manuscritos, entre otros.
Un mosaico que pertenecía a uno de los opulentos barcos privados del emperador romano Calígula, robado tras la Segunda Guerra Mundial, emprendió el camino de regreso a Italia desde Estados Unidos luego de ser recuperado de una colección privada.
El mosaico de mármol que data del siglo I adornaba uno de los barcos ceremoniales de Calígula que fue hallado en el fondo del lago Nemi, cerca de Roma, en la década de 1930.
El artefacto, robado del Museo de Barcos Romanos de Italia después de la guerra, fue recuperado por la oficina del fiscal de distrito de Nueva York de la colección de una mujer italiana que vive en la ciudad luego de una investigación de la policía italiana.
“Estados Unidos devolvió a Italia varios tesoros arqueológicos que resultaron de excavaciones clandestinas o robos en nuestro país”, dijo el ministro de Cultura Dario Franceschini.
“Regresarán a los lugares de donde los criminales los tomaron”, añadió desde Nueva York.
Entre otros elementos de la época romana recuperados hay un jarrón de la región de Puglia que data de alrededor del 350 antes de Cristo, que llegó hasta el Museo Metropolitano de Nueva York, y dos ánforas de los siglos IV o V antes de Cristo. El jarrón fue tomado en una excavación ilegal en la década de 1980.
Los artículos presentados en la conferencia de prensa también incluían monedas romanas, libros y manuscritos.
Calígula, cuyo nombre real era Cayo Julio César, fue emperador entre los años 37 y 41. Documentos históricos lo describen como un hombre demente, violento y sádico que ordenaba asesinatos a su antojo. Según la leyenda, planeó convertir a su caballo Incitato un cónsul.