La compañía reveló en noviembre que Dengvaxia podría aumentar el riesgo de que se desarrolle la enfermedad en forma severa en personas que nunca han sido expuestas al virus.
Nuevas vacunas contra el dengue desarrolladas por Takeda Pharmaceuticals Co Ltd y científicos del Gobierno de Estados Unidos brindarían una alternativa más segura al fármaco Dengvaxia de Sanofi, según expertos en vacunas, porque ya toman en consideración algunos temas que marginaron al producto el año pasado.
Sanofi reveló en noviembre que Dengvaxia -la primera vacuna contra el dengue en el mundo- podría aumentar el riesgo de que se desarrolle la enfermedad en forma severa en personas que nunca han sido expuestas al virus. La noticia provocó indignación en Filipinas, donde más de 800.000 niños en edad escolar habían sido vacunados.
Las vacunas de próxima generación de la japonesa Takeda y los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por su sigla en inglés), junto al Instituto Butantan de Brasil, están ahora en sus últimas etapas de ensayo.
Ambos difieren significativamente del Dengvaxia, que podría aumentar la probabilidad de una respuesta inmune más fuerte y duradera, según más de una decena de expertos en dengue entrevistados por Reuters.
Manifestaron esperanzas especialmente altas con la vacuna de los Institutos Nacionales de Salud, que protegió al 100 por ciento de voluntarios que la recibieron en un estudio pequeño.
Merck & Co Inc tiene una licencia exclusiva para la vacuna de los NIH en Estados Unidos, Canadá, China, Japón y la Unión Europea, y planea empezar sus propios ensayos en la primera mitad de 2018.
Es demasiado pronto para decir qué candidato finalmente será exitoso y los expertos esperan datos de ensayos clínicos más grandes y en etapas finales.
Y aunque los problemas iniciales de seguridad de Sanofi podrían retrasar las licencias para nuevas vacunas por algunos años en la medida en que los reguladores globales buscan garantías de datos a largo plazo, el mayor escrutinio debería dar como resultado un producto mejor y más seguro, dijeron.
"Hemos aprendido una tremenda cantidad sobre el dengue a partir de la vacuna de Sanofi", comentó la doctora Anna Durbin, investigadora de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad Johns Hopkins, que ayudó a desarrollar la vacuna de los NIH.
El dengue es la enfermedad infecciosa de más rápido crecimiento en el mundo. Afecta hasta a 100 millones de personas a nivel global, provoca medio millón de infecciones que amenazan a la vida de los pacientes y provoca la muerte de hasta 25.000 personas, la mayoría de ellos niños, cada año.
Existen cuatro tipos diferentes de dengue y los expertos dicen que una vacuna efectiva debe proteger contra los cuatro tipos en forma simultánea.
La vacuna de Takeda está siendo probada en 20.000 niños de entre 4 y 16 años en Asia y América Latina. Se esperan datos iniciales para fines de 2018.