Un nuevo estudio encontró que quienes contraen COVID-19 pueden presentar una secuencia predecible de síntomas. El orden difiere de los síntomas de gripe y otros coronavirus.
La evidencia que han recolectado cientos de científicos alrededor del mundo en los últimos ocho meses indican que el orden más probable de síntomas iniciales de COVID-19 comienza con fiebre, y luego progresa hasta convertirse en tos, dolor muscular, luego nauseas o vómitos, y diarrea.
Estos síntomas corresponden a otros virus como la influenza, pero el orden en el que se presentan es diferente al de otros virus respiratorios. Por eso, un grupo de científicos de la Universidad de Michigan y la Universidad de California aplicaron un modelo estadístico que reúne datos de 55 mil casos de coronavirus en China, recolectados por la Organización Mundial de Salud, y que compara el orden de los síntomas de COVID-19 con el orden de miles de casos de influencia, y cerca de 150 síndromes agudos respiratorios (SARS).
“Nuestro modelo predice que la influenza se inicia con la tos, mientras que el COVID-19, al igual que otras enfermedades relacionadas con el coronavirus, se inicia con la fiebre. Sin embargo, COVID-19 difiere del SARS y MERS en el orden de síntomas gastrointestinales. Nuestros resultados apoyan la idea de que la fiebre debe usarse para detectar la entrada a las instalaciones a medida que las regiones comienzan a reabrirse después del brote de la primavera de 2020. Además, nuestros hallazgos sugieren que una buena práctica clínica debe incluir registrar el orden de aparición de los síntomas en COVID-19 y otras enfermedades”, escriben los investigadores.
De acuerdo con Science Alert, cuando simularon los síntomas de coronavirus para 500 mil pacientes, encontraron "un orden más común de síntomas discernibles que también es diferente de otras enfermedades respiratorias importantes. Incluso cuando los autores incluyeron otros síntomas como dolor de garganta, dolor de cabeza y fatiga, el orden de los cuatro síntomas iniciales más probables siguió siendo el mismo.
Dado que la fiebre parece ser lo primero, tomarle la temperatura a alguien podría ser un mecanismo de detección válido. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos ya recomiendan que las personas se tomen la temperatura antes de salir del aislamiento para asegurarse de que sea segura, y esta nueva investigación lo respalda.
“La importancia de conocer los primeros síntomas radica en la necesidad de detener la propagación del COVID-19, una enfermedad que es dos o tres veces más transmisible que la influenza y que da lugar a brotes. Existe un mayor riesgo de transmisión de COVID-19, por lo que las pruebas más rápidas y el distanciamiento social son importantes, especialmente cuando se relajan las medidas de distanciamiento social y cuarentena. Nuestros resultados afirman que la fiebre es el síntoma más probable de que ocurra primero en pacientes adultos sintomáticos con COVID-19. Esperamos que las hipótesis generadas en este trabajo se prueben con datos clínicos prospectivos para confirmar que la tos ocurre primero con mayor frecuencia en la influenza y también fiebre en el COVID-19. Creemos que los detectores tempranos que cualquier individuo puede reconocer para buscar atención médica antes son útiles”, concluyen los investigadores, que publicaron su estudio en la revista Frontiers in Public Health.