La pérdida paulatina de la visión, de la memoria, el insomnio, la depresión y la ansiedad de comer, son los cinco efectos negativos más recurrentes de la excesiva exposición a la luz de la pantalla del celular.

La pérdida paulatina de la visión, de la memoria, el insomnio, la depresión y la ansiedad de comer, son los cinco efectos negativos más recurrentes de la excesiva exposición a la luz de la pantalla del celular, sobre todo en las noches, alertan dos especialistas.

“La pantalla del celular está formada por pequeñas luces de colores y es el azul intenso el que afecta de manera directa a algunos receptores del cerebro, incluso durante el día, y una persona adicta al celular, sobre todo aquellas que lo usan hasta en la cama, están expuesta a una variedad de problemas en su salud”, advirtió Horacio Morales, médico general.

El galeno especificó que la luz azul del celular altera la producción de melatonina (hormona que se libera en la oscuridad y se encarga de sincronizar las funciones del organismo, del reloj biológico) y con ello causa que la persona no tenga el descanso necesario, además produce efectos adversos que van directo al cerebro.

“La alteración del ciclo del sueño por la luz del celular provoca que la memoria sea débil, por lo que a la persona le costará más recordar algunas cosas y puede que no incorpore bien los aprendizajes del día anterior. A todo esto se agrega el desequilibrio alimenticio, pues aumentan las ganas de comer, no importa si es de la noche, lo que a la larga se traduce en sobrepeso u obesidad”, especificó.

El director del Instituto Nacional de Oftalmología (INO), Joel Moya, indicó que la luz azul de los celulares causa daño irreversible a la vista que pueden acelerar los procesos de ceguera. “La exposición prolongada a este efecto lumínico da paso a moléculas venenosas en las células del ojo”.

De hecho, alteraciones como el enrojecimiento o sensibilidad en los ojos son solo algunas de las consecuencias mínimas del abuso del celular. El especialista señaló que es posible llegar a sufrir enfermedades como la miopía o la degeneración macular (capa de tejido en la parte posterior del ojo), esta última es la principal causa de ceguera en el mundo.

Ante el peligro del uso excesivo del celular, los dos galenos recomendaron a la población realizar pausas cada 20 minutos, es decir, dejar el celular, caminar o correr y cerrar los ojos por unos segundos, alejarse de las pantallas por lo menos dos horas antes de ir a dormir.

“Al ser la luz del celular ya un problema para la salud, hay equipos en el extranjero que se activan automáticamente al atardecer y disminuyen la intensidad de la luz azul, cambian la tonalidad para tener menos efecto en la retina y en el cerebro”, señaló Morales.

También aconsejó visitar al oftalmólogo, traumatólogo y, si el caso amerita, a un neurólogo para revisiones y orientación.

Conozca los problemas del uso excesivo del celular

1.Insomnio. La melatonina es una hormona natural producida por el cerebro durante la noche para ayudar a regular el sueño y promover el buen funcionamiento del organismo, pero la luz de la pantalla del celular impide su producción y ya no hay regulación del sueño ni descanso. Además, esta luz aumenta la producción de neurotoxinas que causan insomnio.

2.Apetito. La luz del celular por la noche crea un desbalance en las hormonas que controlan el apetito y el riesgo de ansiedad de comer aumenta. Con ello se provoca un desequilibrio, debido a que el efecto de antojos se inicia 15 minutos después de estar expuestos a la luz y persiste hasta dos horas después de ingerir la comida.

3.Visión. Hay daño a la vista porque esa luz puede debilitar las células fotosensitivas de la retina. Aumenta el riesgo de un síndrome de fatiga visual, lo que obliga a utilizar lentes para la vista cansada.

4.Depresión y estrés. La reducción de la melatonina, además de causar insomnio, puede aumentar la posibilidad de cuadros frecuentes de depresión o agresividad. A ello se agrega el estrés, porque la persona no concibe estar desconectada, por lo que su mente nunca descansa y no le da tiempo a su cuerpo y organismo de recuperarse, y ello aumenta la tensión y nerviosismo.

5.Memoria. Entre los efectos adversos por esta situación está que la capacidad cognitiva de las personas disminuye y empiezan a olvidar. La luz del celular daña esta capacidad, entonces hay una falta de concentración.