Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, México, indica que los componentes de la conocida planta disminuyen la acumulación de grasa y los niveles de glucosa.
El agave azul (cactus), una de las plantas más apreciadas de México, se perfila para ser reverenciada como algo más que la génesis del tequila, ya que diversos estudios científicos concuerdan en señalar que la especie funciona como un efectivo antídoto contra la obesidad.
Laura Márquez, doctora en Ciencias Biomédicas, dirige hace un par de años un proyecto en el estado de Jalisco destinado a demostrar los beneficios del agave azul para disminuir el sobrepeso y la diabetes, un mal que castiga a siete de cada diez mexicanos.
Según la experta, adscrita al Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño de Jalisco, la piña cruda del agave contiene fibras solubles naturales a las que se las denomina fructanos.
Explica que, dependiendo de su composición, estas fibras presentan propiedades benéficas para la salud.
La científica ha llevado adelante investigaciones en animales con dieta alta en grasa, revelando que al separar los compuestos de las fibras del agave en fructanos de cadena corta y larga, hallaron que los primeros disminuyen la ganancia de peso, acumulación de grasa y los niveles de glucosa; y que los fructanos de cadena larga disminuyen los triglicéridos.
Así las cosas, las proyecciones de la planta ahora también se centran en el cuidado de la salud y no sólo para decir "salud".
