Este es el cuarto y último día de las elecciones europeas, el segundo ejercicio democrático más grande del mundo. Los sondeos auguran un alza de la extrema derecha, los nacionalistas y los euroescépticos.
Europa.- Millones de europeos escogen este domingo a sus representantes al Parlamento Europeo, dando el puntapié inicial al cambio de ciclo político en la Unión Europea (UE).
Posible auge de la extrema derecha y el nacionalismo. De Italia a Hungría, pasando por Francia, los sondeos auguran un alza de las fuerzas de extrema derecha, nacionalistas o euroescépticas, tras una legislatura marcada por los coletazos de la crisis de la deuda, la migratoria y la saga del "brexit”.
Grecia, que sufrió de primera tanto los planes de rescate como la llegada de migrantes, es precisamente uno de los 21 países europeos que empezaron a votar este domingo, en el cuarto y último día de elecciones europeas.
Las miradas están puestas no obstante en los conocidos como "seis grandes”, países con más eurodiputados a escoger, como Italia y Francia, donde los partidos nacionalistas la Liga y Agrupación Nacional podrían imponerse.
"Votar por la Liga el domingo significa más fuerza para cerrar puertos y controlar las fronteras no sólo en Italia sino en toda Europa", dijo días atrás su líder y hombre fuerte del gobierno italiano, el ultraderechista Matteo Salvini.
Pulso entre europeístas y euroescépticos. Con un aumento de 20 escaños, según los sondeos, el partido de Salvini está llamado a convertirse en el principal vencedor de los comicios, pero las fuerzas euroescépticas no lograrían superar a los proeuropeas, pese a una eventual progresión.
Los mandatarios europeístas se esforzaron en frenar su auge. El liberal francés, Emmanuel Macron, cuyo partido enfrenta en su país al de la ultraderechista Marine Le Pen, advirtió que con el "odio" no se "puso fin a la guerra" en Europa.
Los Países Bajos, primera nación en votar el jueves junto a Reino Unido, dio precisamente la sorpresa al quedar en primer lugar los socialdemócratas, por delante de liberales y eurófobos, según los sondeos a boca de urna.
Actualmente, los grupos considerados como euroescépticos de derecha en el Parlamento Europeo cuentan con alrededor del 20 por ciento de los 751 escaños y podrían progresar hasta el 25 por ciento, un número insuficiente para bloquear sus trabajos.
Las segundas elecciones más grandes del mundo. Más de 400 millones de europeos estaban llamados a escoger por novena vez a sus eurodiputados desde el jueves, en lo que es el segundo ejercicio democrático más grande del mundo, después de las elecciones generales de la India.
Los primeros resultados en los 28 países de la UE se conocerán a partir de las 21H00 GMT, cuando los colegios cierren en Italia.
El resultado de los partidarios del "brexit” en Reino Unido es una de las principales incógnitas a despejar, así como si los Verdes progresan, impulsados por las protestas estudiantiles para concienciar sobre el cambio climático.
Las elecciones son la primera etapa. Las elecciones representan de hecho la primera etapa para escoger a quienes se encargarán de liderar las principales instituciones del bloque el próximo lustro y cuya designación corresponde a los mandatarios europeos en su cumbre de junio.
La presidencia de la Comisión Europea es la joya de la corona, aunque el tesoro de altos cargos también cuenta con las presidencias del Consejo Europeo y el Banco Central Europeo (BCE), así como con el liderazgo de la diplomacia de la UE.
El Partido Popular Europeo (PPE, centro-derecha), primera fuerza del bloque, y los socialdemócratas se han repartido en las últimas legislaturas los puestos de responsabilidad, al sumar entre ambos la mayoría de escaños en el Parlamento.
Sin embargo, de confirmarse los sondeos, ambos están abocados a buscar pactos con otras familias políticas proeuropeas, como liberales o ecologistas, por lo que el reparto de altos cargos podría ser más complejo.
Los mandatarios europeos se reunirán el martes en Bruselas para abordar el reparto de altos cargos.
Los periodos de los legisladores europeos actuales finalizan el 1 de julio y el nuevo Parlamento tomará sus escaños en Estrasburgo al día siguiente.