La directora creativa de la compañía de lencería y trajes de baño española Andrés Sardá está convencida de que el éxito de la compañía, que comenzó hace 52 años, se basa en “tener un estilo propio” y romper con las tendencias que rigen la moda.
Desde su fundación, el año 1962, la compañía catalana de lencería y trajes de baño Andrés Sardá ha enfocado sus diseños con la idea de subrayar una “personalidad creativa” y apostando por nuevos diseños con materiales innovadores. Así lo subraya Nuria Sarda, hija del sueño y actual directora creativa de la empresa.
El domingo recién pasado culminó la Semana de la Moda de Miami, instancia en que la ejecutiva fue invitada a dar una clase magistral en torno a la manera que se ha llevado adelante la destacada compañía, única en recibir dos veces el premio “Creador del año” en la Feria de Lencería de París, el certamen de su tipo más importante del mundo.
“Siempre se ha de seguir muy fiel, evolucionando en la medida lógica, pero siguiendo con esa sintonía que le da la característica al proyecto. Un aspecto importante es saber cómo evolucionar siendo fieles a un concepto”, subrayó la hija del diseñador Andrés Sardá.
La profesional explicó que “resulta muy importante aportar algo nuevo y ser creativo” a la hora de diseñar nuevos productos de moda. “No hay que darse nunca por satisfecho con lo que tienes, sino que siempre hay que intentar mejorar y dar un paso más adelante”, añadió.
La empresa catalana fue fundada por el empresario textil ya retirado Andrés Sardá y desde entonces la compañía siempre se ha enfocado en los diseños de lencería y moda de baño para la mujer con una gran “personalidad creativa” y apostando por nuevos diseños con materiales innovadores, como el cristal de Swarovski.
Nuria Sardá señaló que el sector de la ropa interior “ha sufrido mucho” en los últimos años a consecuencia de la crisis, pero que -poco a poco- va recuperando posiciones. “Vuelve a ver una tendencia importante, a nivel de moda, por la ropa interior y mostrarla”, dijo.
Sardá defendió el “placer personal” de “vestirse bien por dentro” con cuidadas prendas de lencería como las que ella misma diseña. “Vestirte bien por dentro te da el mismo subidón que ir a la peluquería, perfumarse o maquillarse. Aunque nadie lo sepa, tú te sientes mejor”, apostilló.
