En una carta enviada al gobierno y al Congreso del Perú, los especialistas señalan que la Ley 30021, (Ley de alimentación saludable) es un "buen punto de partida" para detener la epidemia de obesidad y enfermedades asociadas y evitar el dolor humano, así como los altos costos sociales y económicos que acarrean esos males.
Representantes de diversas instituciones de salud y prestigiadas universidades del mundo se manifestaron a favor del etiquetado frontal con advertencias sobre el contenido de los productos comestibles procesados, considerando que la ciencia ha comprobado que la llamada "comida chatarra" provoca la obesidad y enfermedades asociadas.
En una carta enviada al gobierno y al Congreso del Perú, los especialistas señalan que la Ley 30021, (Ley de alimentación saludable) es un "buen punto de partida" para detener la epidemia de obesidad y enfermedades asociadas y evitar el dolor humano, así como los altos costos sociales y económicos que acarrean esos males.
"Esta ley se basa en el correcto entendimiento de que la ´comida chatarra´ está desplazando a los alimentos naturales y a la culinaria tradicional, los que son preciso proteger y promocionar", señala la misiva.
Esta comunicación alude a la alerta que han recibido de la pretensión de la Comisión de Defensa de Consumidor del Congreso de la República de modificar la citada ley, eliminando el etiquetado frontal con las advertencias "alto en azúcar", "alto en sodio" y "alto en grasas saturadas" y reemplazándolas por el modelo GDA, que indica los cantidades de los componentes de los productos.
"Como académicos especialistas en obesidad y diabetes, queremos dejar en claro que la ciencia es concluyente en el rol de la "comida y bebidas chatarra": un consumo creciente de estos productos es la causa de obesidad y enfermedades asociadas", afirman.
Agregan que por esa razón apoyan el uso de etiquetas frontales con advertencias "como una medida crítica para informar a los consumidores y de esta forma frenar el consumo de comida no saludable y alentar la reformulación de esos productos".
Firman la misiva representantes de las universidades New York University, de Illinois, Liverpool, George Washington y Connecticut, entre otros.
También del Centro para la Prevención de la Obesidad de la Universidad de Deakin, del Institutot para la Salud Global de Duke y dela escuela de medicina Clínica de la Universidad de Cambridge.