El reporte "Prevención vigilancia y control de infecciones", que presentará recomendaciones al primer ministro del Reino Unido en mayo próximo, advierte que se requiere encontrar soluciones para controlarlas con miras a la mitad del siglo.
Xinhua. Un problema global. Así define a la resistencia bacteriana a los fármacos el informe publicada por the Review, el último en una serie de reportes en base a los cuales se presentará recomendaciones al primer ministro británico en mayo.
El documento se titula "Prevención vigilancia y control de infecciones: limitando el desarrollo y avance de la resistencia a las drogas" y pone énfasis en la resistencia a los antimicrobianos (AMR) y especialmente a los antibióticos.
De acuerdo con el informe, muchos países tuvieron progreso notable en el combate de las enfermedades infecciosas en el Siglo XIX, mucho antes de que los fármacos modernos estuvieran disponibles. El foco, en ese tiempo, estaba puesto entonces en la prevención y la inversión en infraestructura pública. Ese enfoque, para los expertos, sigue siendo vital, pero el gasto público se ha concentrado en el tratamiento, en momentos en que los medicamentos se han vuelto más accesibles.
"Si no encontramos una solución para que las autoridades implementen desde ahora hasta el 2050, 10 millones de personas morirán cada año en todo el mundo. Sin una solución, más de US$ 100 billones se perderán. Ese valor es más alto que el de toda la economía mundial", dijo el autor principal del reporte, Jim O'Neill.
El gobierno británico ya tiene un plan de cooperación con China al respecto y O'Neill espera que, a nivel global, se genere un fondo de innovación que supere los US$ 2 mil millones. "Tenemos esperanza de que los países del G20 y sus ministerios de hacienda sigan nuestras recomendaciones", concluyó.