Consideran que si el dinero se destinara a inversión en infraestructura y no a gasto corriente, se podría ayudar a la economía en el corto plazo.
Utilizar los recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), sin que todavía se tenga una recesión económica en el país, da un mal mensaje e incertidumbre sobre la situación de las finanzas públicas, coincidieron expertos. A su parecer, si bien la economía mexicana está presentando crecimientos nulos, tampoco está en una situación en la que no pueda pagar sus compromisos financieros como el interés de la deuda para tener que utilizar tantos recursos del FEIP.
“Queda un mal sabor de boca porque no había una circunstancia particular de vacas flacas; estamos entrando a un crecimiento cercano a cero, pero no hay una recesión como tal, entonces, ahí te deja el mal sabor de boca el que se use el FEIP”, expresó Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica Presupuestaria (CIEP).
Para mitigar el faltante de ingresos presupuestarios como efecto de una desaceleración económica, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) prevé utilizar 57,7% del FEIP, que son 150.000 millones de pesos, con el fin de cubrir las necesidades de gasto.
Villarreal comentó que también deja una mala impresión el hecho de que gran parte de los recursos que se esté utilizando será para seguir apoyando a Petróleos Mexicanos (Pemex).
“A nadie le termina de gustar el plan de Pemex, se ve muy endeble y es ahí donde pareciera que una gran parte de los recursos del FEIP te lo estás echando en un caprichito”, expresó.
El director del CIEP consideró que este tipo de medidas sólo generará que se incremente el riesgo país de manera innecesaria.
Ayuda de corto plazo. Alejandro Saldaña, gerente de análisis económico de Bx+, coincidió en que el país no está en una situación de crisis económica como para echar mano de los recursos del FEIP.
“Si bien puede ser una medida efectiva en el corto plazo para reactivar la economía, el problema es que te quedas desprotegido en caso de que sí llegara a existir una crisis”.
Indicó que, si los recursos del FEIP se destinaran a inversión en infraestructura y no a gasto corriente o Pemex, se podría ayudar a la economía en el corto plazo.
Con respecto a si México requiere de una política contracíclica como plantea la SHCP, Saldaña consideró que, si bien es buena la propuesta, no se debe sustituir el FEIP por un fondo contracíclico. Lo ideal es que se contara con los dos : el FEIP y el contracíclico.
“Es importante contar con estos fondos de emergencia para tener cierta habilidad en temas de finanzas públicas, pero adicionalmente se deberían tener fondos contracíclicos que se formen a lo largo de los años; es decir, no sustituir uno por otro, sino que puedan convivir las dos opciones al mismo tiempo sin tener ningún problema”.
Preocupan estimaciones del 2020. Para James Salazar, subdirector de análisis económico de CIBanco, uno de los temas que más genera vulnerabilidad en las finanzas públicas es que los estimados macroeconómicos del 2020 sean muy optimistas.
Explicó que, para el 2020, la SHCP está contemplando un crecimiento económico promedio de 2%, lo cual se ve difícil de lograr; además, ello significaría que los ingresos fueran mayores a lo esperado, lo cual también se ve complicado e implicaría volver a usar los recursos del FEIP.
“El problema es que la situación económica no ha tocado fondo y las perspectivas del 2020 lucen demasiado optimistas y es probable que se tenga que recurrir a los recursos (del FEIP) y se acaben y eso implicaría que se empiecen a gestionar ahorros a través de más recortes al gasto”.
Salazar concluyó que, si bien el gobierno presentó buenos balances macroeconómicos al tercer trimestre del 2019, el gasto público no está generando un valor agregado a la economía.
“Los grandes rubros se ven bien, pero el valor agregado del gasto no es positivo y tiene que ver con que no se destinan a rubros productivos y que los programas sociales no están aportando tampoco al consumo”.
Más para Pemex a costa de menos inversión. Ante un entorno de bajo crecimiento económico y con menores ingresos por recaudación, se reduce la inversión física pública (en 22%) y se destinan más recursos a Petróleos Mexicanos (Pemex), (por 97.000 millones de pesos) a costa de sectores prioritarios, advirtió México Evalúa en un análisis de las cifras del informe trimestral a septiembre, difundido por la Secretaría de Hacienda la semana pasada.
A decir de los especialistas, “hacen falta instrumentos específicos para que la inversión pública se despolitice y se tengan diagnósticos claros que se traduzcan en mayor valor para los mexicanos”.
Hace énfasis en que el valor de la construcción pública continúa en niveles bajos, de acuerdo con la Encuesta de Empresas Constructoras. Aclara que esta situación se presentó de manera similar en el primer año de la administración anterior; pero en esta ocasión se encuentra en niveles mínimos, no vistos desde la crisis del 2009.
La SHCP bajó aún más la expectativa de ingresos públicos para el 2019. Espera tener un faltante de 184.800 millones de pesos, equivalente a 0.8% del PIB. Lo anterior implica que en el 2019 tendrá que utilizar más recursos (149.000 millones de pesos) del fondo de ahorro (FEIP) de lo que originalmente informó en agosto pasado.
Se sigue observando un menor gasto en salud e inversión, sectores esenciales para el bienestar de la población y el crecimiento económico.