El director global de educación en KidZania se refirió a cómo hoy el mundo debe abordar el liderazgo juvenil, como el de Greta Thumberg.
El actual sistema educativo está atrasado, no se ha adaptado a las necesidades individuales. Ger Graus es enfático en señalar que una buena educación ofrece esperanza. "Demoramos casi 10 años en preguntarle a los niños qué quieren ser. ¿Qué pasa con la confianza de ellos?". Y claro, es que los niños solo aspiran a lo que existe, lo que conocen.
El director global de educación en KidZania estuvo presente en la sexta versión del Congreso Internacional de Innovación Educativa (CIIE), organizado por el Tecnológico de Monterrey.
Entrevistamos a Graus y le consultamos respecto al desarrollo de aspiraciones, cómo abordar el liderazgo juvenil y cómo Kidzania ve la revelación de adolescentes como Greta Thumberg, persona del año 2019, según Time.
- Mencionaba que hay que dejar de preguntarles a los niños qué quieren ser, sino consultarles quién quieren ser. Entonces, ¿cómo trabajar las aspiraciones de manera correcta?
Son simples y fáciles; el problema es que los adultos lo complican. Desafortunadamente, las decisiones educativas se toman por motivos económicos en lugar de razones académicas. Una de las razones por las cuales tenemos escuelas grandes es por razones económicas o, más bien, economías de escala. Si tienes escuelas pequeñas, el encargado del aseo, el director y todo el mundo conoce a cada niño y sus vidas. Esto te permite interactuar con el niño, porque logras conocerlo a un nivel más profundo. Al tener este concepto, te pone en una situación idónea no solo para enseñar, sino motivar a los niños, porque los puedes hacer crecer en cuanto a autoestima, aprendizaje y confianza en sí mismos. La única manera de poder enseñarles valores éticos y morales es si los conoces.
Podemos potenciar estas aspiraciones. El común denominador es que tanto en México como en Estados Unidos buscan una educación al estilo escandinavo. Las aspiraciones son claras, pero el sistema americano no está dispuesto a pagar el costo tan alto de esa educación. Si en Gran Bretaña hay elecciones generales y el partido que gana dice que por cada voto se entregará US$100 destinados a la educación, entonces, si tienen 60 millones de personas y existiera una transparencia del uso de ese monto, la gente lo pagaría con gusto. El panorama se llama democracia.
- Kidzania siempre ha optado por los niños, y hoy los adolescentes ya son figuras públicas. Greta Thumberg, por ejemplo, fue elegida como la persona del año, según revista Time. ¿Esperan este cambio en todo el mundo?
Los niños tal vez están esperando más de nosotros, pero también creo que se lo merecen. Greta es un ejemplo, y han habido otros en el pasado. Me atrevo a decir que hay demasiados pocos de ellos que son señalados en la prensa y en las redes sociales, pero tenemos que ser claros en cuanto a escuchar a todos los niños. Necesitamos encontrar formas de hacer esto mejor de lo que lo hacemos, actualmente, en vez del simbolismo de los consejeros escolares, que es lo más común.
Así que yo sería el primero en decir que necesitamos bajar la edad para votar a los 16 años, y eso llevaría a todos, y tal vez a los que están en el poder, a tomar a los jóvenes más en serio. Así que empecemos una campaña para eso, usemos a gente como Greta de ejemplo para otros. Lo hermoso de ella es que claramente está teniendo un efecto, ya que ciertos políticos de alto nivel, como los presidentes de Brasil y Estados Unidos, están muy molestos. Es bueno que esa gente se moleste; así que felicitaciones a Greta.
- ¿Existe un aprovechamiento de los niños? ¿Se les están quitando infancia, entendiendo que se están ocupando de problemas de adultos que los mismos no han resuelto?
Sí, es necesario que nos aseguremos de que los niños sigan siendo niños. En muchos casos, por supuesto, particularmente en circunstancias con más desventajas, los niños ya están ejerciendo el papel de adultos, y hay muchas instancias en las que los niños son los proveedores de cuidados y velan por la gente, porque el sistema no lo hace. Tenemos que ser muy conscientes de no robarle a los niños su niñez. Eso no quiere decir que no podemos tratarlos como personas responsables. Son dos cosas diferentes. Necesitamos cuidar el ser conscientes de eso.
-¿Kidzania siente su esencia mejorada con este nuevo escenario, donde los niños y adolescentes toman roles de liderazgo?
Kidzania es un lugar donde los niños experimentan el ser independientes y el estar a cargo, además de experimentar que el tomar decisiones, ya sean grandes o pequeñas, tiene consecuencias. Pero probablemente, más importante aún, Kidzania es un lugar donde está bien equivocarse y la oportunidad existe para aprender de esas equivocaciones; equivocarse a medias o estar en lo correcto a medias. La práctica crea la perfección y mientras más práctica tengamos, más experiencia y confianza adquirimos. Y así estamos más preparados para la vida real. Así que veo eso como parte de nuestro papel en cuanto al desarrollo de liderazgos.
- ¿Cuál es el camino que recomienda con respecto a la educación de aquellos niños que sienten pasión por los problemas sociales y quieren ser parte de algo más grande?
A los jóvenes que a cualquier edad tienen empatía por las causas sociales, ¿qué consejo podría darles?... Creo que, probablemente, muy poco. Excepto, involúcrate y hazlo a cualquier nivel. No tienes que estar a cargo para hacer una diferencia. Comprométete, entiende a qué te estás comprometiendo y ten la tenacidad y perseverancia para seguir comprometido. Y estate atento de los bienes y los resultados que pueden no ser grandes, pero muy pronto harás una diferencia. Si observas con cuidado, puedes ver la diferencia de lo que haces, y ese es un gran sentimiento. Disfrútalo y luego hazlo todo una vez más. Finalmente, llegarás.