A pesar de la decisión del país de dejar la Unión Europea, la compañía cree que este sigue siendo un lugar atractivo para la producción de fármacos.

Reuters. GlaxoSmithKline (GSK) planea invertir US$ 361 millones en plantas de producción de tres drogas en Gran Bretaña, lo que indica su confianza en el país, pesar del voto, el mes pasado, por salir de la Unión Europea (Brexit).

La mayor farmacéutica de Gran Bretaña, informó este miércoles que sus ganancias trimestrales estuvieron mejor de lo esperado, impulsadas por las ventas de medicamentos nuevos y las ganancias en moneda, a partir de una caída de la libra, que podría impulsar los resultados de un año completo en 19%.

GSK, que se había manifestado en contra del Brexit antes del referéndum, dijo que el Reino Unido sigue siendo un lugar atractivo para la fabricación de medicamentos, gracias a una mano de obra cualificada y las tasas de impuestos relativamente bajas.

El llamado cuadro de patentes del país aumenta los beneficios de las innovaciones patentadas reduciendo a la mitad la tasa de impuesto de sociedades. Esta reducción de impuestos, que favorece a las empresas farmacéuticas, ha sido objeto de críticas en los últimos días a partir de la oposición del Partido Laborista.

GSK está invirtiendo en sitios en Barnard Castle, en el norte de Inglaterra, Montrose, en Escocia, y Ware, al norte de Londres, para incrementar la producción de medicamentos respiratorios de próxima generación y medicamentos biotecnológicos.

La gran mayoría de estos productos ser exportarán.

"Es testimonio de nuestra fuerza de trabajo calificada en el Reino Unido y la posición de liderazgo del país en ciencias de la vida, que estamos haciendo aquí estas inversiones de fabricación avanzada," dijo el presidente ejecutivo Andrew Witty.

El ministro de Negocios, Greg Clark, señaló que la decisión de GSK fue un claro voto de confianza en Gran Bretaña y demostró que "realmente no hay mejor lugar en Europa para hacer crecer un negocio".

Witty, que se retira el próximo año, dijo que el Brexit podría interrumpir el sistema unificado de Europa para la regulación de medicamentos y potencialmente obstaculizar el acceso a los mejores talentos científicos, pero esto no es suficiente para compensar la competitividad fundamental de Gran Bretaña.

Ayudados por la caída de la libra esterlina

Gran Bretaña representa casi la mitad de la investigación y el desarrollo en todo el mundo de GSK, y alrededor de un tercio de su fabricación.

La incertidumbre que rodea a la votación para salir de la Unión Europea en el referéndum del mes pasado, ha aumentado los temores sobre la inversión corporativa en Gran Bretaña, donde algunos economistas temen que podrían exacerbarse los tiempos difíciles en el futuro, mientras el gobierno negocia las relaciones comerciales futuras.

Por lo tanto, una inversión sustancial de GSK da cierta tranquilidad y sigue las señales de los compradores extranjeros, atraídos por una caída en la libra, buscan aprovechar los bajos precios en Gran Bretaña, un ejemplo es lo que ya realizó el grupo japonés SoftBank, con su adquisición de US$ $ 32.000 millones por el diseñador de chips ARM Holdings.

La dirección de la empresa francesa EDF, por su parte, se reunirá el 28 de julio para considerar una decisión final de inversión en su proyecto nuclear de US$ 24.000 millones de Hinkley Point C en Gran Bretaña.

La industria farmacéutica tiene una historia de gran éxito en Gran Bretaña, dando empleo directo a más de 70.000 personas y representa el 25% de todo el gasto en investigación y desarrollo de negocios.

Fase de recuperación

Witty ha estado bajo presión desde el año 2013, ya que las ganancias han decaído y algunos inversores han puesto en duda su estrategia, pero señaló que fue "muy positiva" sobre dejar a la empresa en una fase de recuperación fuerte cuando se retire el próximo mes de marzo.

GSK subió su pronóstico de ganancias estructurales para todo el año de crecimiento por acción (EPS) en unidades monetarias constantes entre 11 y 12% del 10 al 12% visto anteriormente, después del segundo trimestre con EPS básicas de 24,5 peniques, superando los pronósticos de los analistas de 21,0.

Los analistas de Berenberg Bank dijeron que los resultados fueron potentes y el efecto de la moneda fue mayor de lo esperado, lo que ayuda a la subida en las acciones de GSK en torno al 2%.

Las inestables condiciones de las divisas, sin embargo, complican la contabilidad de la mayoría de la propiedad de GSK en la salud de los consumidores y el negocio del VIH, lo que resulta en una carga US$ 2.360 millones. Esto refleja que estas operaciones son ahora más valoradas en términos en relación a las libras esterlinas y, por tanto, GSK es responsable de pagarles mas a sus socios si se deciden a vender.

GSK dijo que sus nuevas inversiones en manufactura podrían crear algunos nuevos puestos de trabajo. En Barnard Castle, invertirá US$ 120,6 millones en una instalación estéril para hacer medicamentos biotecnológicos, mientras Montrose obtendrá US$ 110 millones para una nueva unidad de fabricación de componentes de medicamentos de pulmón, y US$ 74 millones en Ware, que expandirá la producción de su inhalador Ellipta.