Países como Brasil podrían ser los más afectados.

El gobierno indio reconoció que baraja la posibilidad de aumentar el impuesto a las importaciones de azúcar, desde el actual 40% a un 60%.

La medida se tomaría para controlar el alto nivel de importaciones y estabilizar los precios internos, ya que una baja en los precios locales afectaría positivamente la capacidad de los dueños de procesadoras para pagar a los productores de caña.

Una medida que contrasta con la tomada a principios de abril de este año, cuando se aplicó una ventana de arancel cero para potenciar el suministro local. 

Los precios del azúcar en el mercado internacional están bajando y el gobierno prefiere no correr riesgos.

La demanda doméstica por zucar en India bordea los 25 millones de toneladas por año, pero aunque la temporada 2016-2017 solo produjo 21 millones de toneladas, todavía hay stock del año anterior.

De aplicarse, en los próximos 45 días, el impuesto afectarí  las toneladas de azúcar que ya partieron desde Brasil hacia India.

En el intertanto, el gobienro le ha pedido a la industria local que mantenga la brecha entre precios globales y domésticos, de forma que los comerciantes no se beneficien de las importaciones. 

Actualmente, los precios del azucar no refinada han bajado respecto del valor que tenían a principios de este año, situándose en 13 centavos de dólar por libra.