En medio de cuestionamientos sobre el destino de los fondos, el Congreso guatemalteco aprobó un préstamo que recibiría del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento. Desde el gobierno del país latinoamericano aseguraron que el dinero se destinará a pagar deuda.
El congreso de Guatemala aprobó un préstamo de US$ 500 millones con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), parte del Banco Mundial, que el Gobierno ha dicho usará para pagar deuda.
El ministro de Finanzas, Álvaro González, aseguró días atrás que el desembolso "indispensable" ahorraría fondos que podrían destinarse a gastos sociales, pero algunos críticos han dicho que el Gobierno no debería tomarlo en medio de cuestionamientos sobre cómo se usarán los fondos, de acuerdo a medios locales.
El país centroamericano llegó a un acuerdo por el préstamo en 2020, pero el Gobierno lo presentó al Congreso este año.
"Ojalá que el pueblo de Guatemala alce su voz ante este descaro", dijo el legislador opositor Samuel Pérez, antes de votar en contra del préstamo.