Los productos no nuevos o medicamentos genéricos que se utilizan en Guatemala se regirán por el Reglamento Técnico Centroamericano, luego de la resolución y aclaración emitida por la Corte de Constitucionalidad (CC), que establece que estas medicinas deben presentar estudios clínicos.
Geldi Muñoz y Andrea Orozco para Prensa Libre. Además, las autoridades de Salud pretenden reformar el Reglamento para el Control Sanitario de medicamentos y productos afines, con el propósito de facilitar el registro de estos productos.
Autoridades del Ministerio de Salud confirmaron este lunes que debido a la acción de inconstitucionalidad planteada por la farmacéutica J.I. Cohen, y que la CC dio lugar a esta, las empresas que trabajen con fármacos genéricos deben presentar estudios clínicos, lo que implicaría un gasto para las farmacéuticas y elevaría el costo de los productos.
Por ello, y luego de que la CC publicara una aclaración de oficio, la cartera recurrirá al Reglamento Técnico Centroamericano que dejaría, por un tiempo que estos productos se mantengan sin presentar esos estudios, mientras se reforma el Reglamento para el Control Sanitario.
“Tenemos que respetar la decisión de la CC en el sentido en que expulsaron el tema de los registros, pero ante la ausencia de la norma nacional, vamos a aplicar el reglamento centroamericano”, dijo el ministro de Salud, Mariano Rayo.
El funcionario confirmó que los técnicos de la cartera elaboran un nuevo reglamento de registros de productos farmacéuticos y afines, del cual ya se tiene una versión preliminar que es revisada para comenzar el proceso de aprobación en la presidencia.
Rayo resaltó que esta reforma permitirá hacer cambios importantes, como darle más fuerza a la vigilancia y supervisión de la calidad de los medicamentos que se comercializan en el país.
La viceministra técnica de Salud, Velia Olivia, indicó que si no se resuelve la situación, se podría afectar hasta 400 productos. Agregó que esta acción emitida por la CC afecta la salud de los guatemaltecos, ya que el costo de las medicinas elevaría a tener que efectuar exámenes de productos que ya los tienen.
Oliva Resaltó que por cada Q100 (100 quetzales) que gasta un guatemalteco en salud, Q75 (75 quetzales) corresponden a la compra de medicamentos.
El ministro resaltó que solicitó una reunión, virtual o presencial, con el Consejo de Ministro de Salud de Centroamérica porque teme que la empresa J.I. Cohen, que tiene subsidiarias en la región, podría plantear acciones similares en otros países.