El gerente general de la consultora IDEO, Tom Kelley, brindará una charla en Uruguay que busca motivar a los líderes a fomentar la innovación en todos los aspectos de sus empresas y, así, convertirlas en más exitosas.
Para muchas empresas ser innovadoras y creativas no es tarea sencilla. No obstante, existe una organización que se dedica a ayudar a que lo sean: IDEO. Esta consultora de Silicon Valley fue responsable de productos únicos como el peculiar mouse de Apple y la Palm V, entre otros. Los hermanos Tom y David Kelley lideran esta firma, reconocida a nivel mundial. Café & Negocios Emprendedores conversó con Tom Kelley, gerente general de IDEO, sobre algunas de los conceptos que expondrá en la ocasión.
Sobre su participación en Trama Empresas de la Agencia de Investigación e Innovación (ANII) en Uruguay, dijo que "una de mis metas en la vida es difundir una idea llamada “creative confidence” (confianza o seguridad creativa) y he ido a trece países este año para tratar de ayudar a la gente a tener más confianza en su creatividad. La razón principal de mi visita a Uruguay es ayudar a la gente a aferrarse a su creatividad para que sus compañías tengan más éxito. Tengo un libro sobre ese tema, denominado también Creative Confidence, pero no hablaré mucho sobre el libro sino sobre la idea".
-¿Cuál es la idea principal?
Que todos somos creativos, todos; algunos lo tienen un poco más escondido que otros. El concepto se aplica tanto a individuos como a organizaciones. Creo que hay que tratar de sacar esa creatividad para divertirse más en el trabajo y tener mayor impacto y éxito con la innovación.
-¿Cómo se hace para construir una empresa creativa e innovadora?
Hay muchos elementos. Si querés tener una compañía creativa, tiene que incluirse la creatividad en todos los aspectos de cómo se la dirige. Por ejemplo, cuando buscás empleados debés fijarte no solo si es competente sino también si es creativo; en tu evaluación de desempeño y en reuniones tenés que hablar de conceptos creativos. Hay que tener en cuenta también cómo diseñar el espacio físico. Lo más importante para un líder es entender que tiene que estar presente en todos los aspectos de dirigir la compañía.
-¿Y los principales errores?
Hay muchos errores. Uno muy peligroso es pensar que por ser exitoso hay que dejar de cambiar. En la historia, compañías grandes como Sony, Kodak, Nokia fueron tan exitosas que pensaron que no debían transformarse, sin darse cuenta de que hasta en las compañías más exitosas hay que innovar. Ese es un error muy grande, siempre hay que ser innovador.
-Usted fue uno de los que acuñó el concepto de Design Thinking, ¿qué es?
Significa tomar el enfoque que las metodologías usaron por décadas para diseñar productos o servicios y aplicarlas para cualquier tipo de problema. Esas metodologías usadas por diseñadores son muchas, pero hay tres importantes. Una es que cuando se empieza con empatía se observa y estudia el comportamiento humano como una forma de encontrar ideas. La segunda es que al hacer prototipos de ideas, se aprende a través de experimentar. Aunque se sepa que esos experimentos van a fallar, se adopta la experimentación como una forma de aprendizaje. Y la tercera se trata de usar el poder de contar historias para darle vida a las ideas. Cuando se originan ideas, hay que hacer que la gente las entienda y crea en ellas.
-¿Qué diferencia hay entre un invento e innovación?
Cualquier idea puede ser un invento. Un invento se vuelve una innovación cuando tiene valor, cuando genera ingresos, ayuda al mercado, cuando beneficia al mundo. Un invento puede ser la idea “cruda”, pero se convierte en innovación en el momento que tiene valor para el individuo o para la compañía.
-¿Cómo incentivar la innovación?
Como individuos podemos seguir nuestras ideas más cuidadosamente. La gente tiene un momento en el día en el que tienen sus mejores ideas, algunos en la ducha, cuando trabajan, cuando se despiertan en la mañana… Como líder es cuestión de alimentar la creatividad, por ejemplo, cuando alguien viene con una nueva idea. Puede que no sea perfecta aún, pero tu primera reacción debe ser tratar de construir sobre esa idea, en vez de ser el ‘abogado del diablo’. ‘El abogado del diablo’ siempre tiene ideas y reacciones negativas, pero si podés ser más positivo y construir sobre esas ideas, fomentás la innovación.
-¿Qué tipo de firmas están aplicando esto?
Trabajamos en muchas partes del mundo y descubrimos que no va en el tamaño de la organización sino en la naturaleza de su líder. En mi empresa IDEO no solo trabajamos para compañías grandes o para compañías chicas, preferimos trabajar para líderes visionarios. En definitiva, pensamos que va en el tipo de líder, no en el tipo de compañía.
-¿Hay edad para ser creativo?
La gente joven tiene muchas ideas por su perspectiva, porque no conocen las reglas de la industria. Entonces, se hacen muchas preguntas y estas pueden llevarlos a nuevas ideas.
Muchos piensan que siendo mayor uno no tiene tantas ideas. No obstante, hace poco fui a una exhibición de las obras de Matisse (el artista francés, Henri Matisse) y uno de sus mejores pinturas de toda su colección la hizo a sus 80 años. No hay edad sino una energía que lleva a tener buenas ideas.
-¿Qué aconsejaría a los starters?
Algunas de las decisiones que se toman en el primer año de la compañía van a influenciar en la cultura de la organización por las próximas décadas.
Así que hay que pensar muy bien en qué tipo de compañía quiero tener. Por ejemplo, sirve tener una compañía alegre o una que tenga gente curiosa que siempre quiera seguir aprendiendo. Mi hermano fundó esta compañía hace más de 30 años y una de las cosas que dijo fue: “Quiero un lugar dónde pueda jugar con mis amigos”. Siempre tuvimos esa idea. Algunos principios básicos en el primer año de la empresa van a durar por mucho tiempo, así que hay que pensar profundamente qué quiero antes de empezar a actuar.