Empresas de diseño de videojuegos, productoras y post productoras, son solo algunos de los lugares donde se puede desempeñar el técnico a nivel superior.
La euforia que desató Pokemon Go en todo el mundo es una muestra de que las industrias del entretenimiento, de lo digital y del videojuego están en alza. Chile no está lejos de esta realidad, ya que una empresa nacional creó el videojuego Banana Kong y alcanzó en septiembre las 100 millones de descargas en App Store y en Google Play.
La pasión por los videojuegos puede ser algo más que un hobby y transformarse en una profesión. Así, esas incontables horas sentado frente a una pantalla, compitiendo con amigos o contra la máquina, podrían convertirse en un gran capital para la vida laboral.
De hecho, la industria de los videojuegos lidera cada año las ganancias a nivel mundial y es por eso que se necesitan cada vez más personas que sepan cómo hacer y producir un videojuego, por lo que ya hay universidades que dictan carreras para responder a las nuevas necesidades del mercado.
Cualquier apasionado por las ilustraciones 3D y la creación de proyectos audiovisuales se divertirá en la carrera de los videojuegos. Los alumnos se convierten rápidamente en creativos de la industria del software de entretención, ya que reciben conocimientos teóricos y prácticos para modelar y representar gráficamente los elementos de un videojuego.
Un dinámico campo laboral
Desde hace años, la industria de los videojuegos obtiene más ganancias que el cine o la música. Por lo tanto, el campo laboral es cada vez más amplio y seguro. Empresas de diseño de videojuegos, empresas de animación y diseño digital, productoras y post productoras audiovisuales, agencias de publicidad y marketing, y la industria del entretenimiento, son solo algunos de los lugares donde se puede desempeñar el técnico a nivel superior.
En lugares donde la industria del videojuego está más desarrollada, los sueldos son bastante altos. De hecho, en la Novena Encuesta Anual de Salarios de la Industria de los Videojuegos realizada en 2010 en Estados Unidos y Canadá por la revista Game Developers Magazine, se indica que un director creativo puede ganar un promedio de 90.640 dólares anuales (más de 5 millones de pesos mensuales), un diseñador 61.859 dólares (cerca de 3,5 millones de pesos mensuales) y un programador junior con tres años de experiencia, un sueldo anual de 54.975 dólares (alrededor de 3 millones de pesos mensuales).
¿Y en Chile? “Hay tanta diversidad de empresas grandes, chicas, full videojuegos, variadas, nacionales, internacionales, que el rango es muy variable”, argumenta Lara. Sin embargo, complementa que hay variedad de opciones para ejercer la profesión. “La industria de los videojuegos en Chile da la opción de trabajar en las mismas empresas del gremio que se dedican a eso. También hay otras fuentes laborales, como las empresas híbridas, es decir, que parte de su oferta de valor es hacer un videojuego”, dice.
“Hoy el videojuego no es sólo entretención, sino que también se puede hacer un videojuego con fines educativos, terapéuticos y/o para capacitación laboral. Hay un montón de tecnologías que se van integrando y van generando espacios. Hoy la principal fortaleza es que tú desde Chile puedes publicar usando las redes digitales (iTunes, Google Play), es decir, ya no tienes que ir allá para desarrollar tu proyecto y ni para publicar tu trabajo”, señala el jefe de la carrera en la Universidad del Pacífico.
La Universidad del Pacífico ofrece la carrera de formación técnica en Animación Digital y Diseño de Videojuegos que dura cinco semestres y que tiene abierta la admisión para el 2017.
La euforia que desató Pokemon Go en todo el mundo es una muestra de que las industrias del entretenimiento, de lo digital y del videojuego están en alza. Chile no está lejos de esta realidad, ya que una empresa nacional creó el videojuego Banana Kong y alcanzó en septiembre las 100 millones de descargas en App Store y en Google Play.
La pasión por los videojuegos puede ser algo más que un hobby y transformarse en una profesión. Así, esas incontables horas sentado frente a una pantalla, compitiendo con amigos o contra la máquina, podrían convertirse en un gran capital para la vida laboral.
De hecho, la industria de los videojuegos lidera cada año las ganancias a nivel mundial y es por eso que se necesitan cada vez más personas que sepan cómo hacer y producir un videojuego, por lo que ya hay universidades que dictan carreras para responder a las nuevas necesidades del mercado. Por ejemplo, la Universidad del Pacífico ofrece la carrera de formación técnica en Animación Digital y Diseño de Videojuegos que dura cinco semestres y que tiene abierta la admisión para el 2017.
Cualquier apasionado por las ilustraciones 3D y la creación de proyectos audiovisuales se divertirá en la carrera de los videojuegos. Los alumnos se convierten rápidamente en creativos de la industria del software de entretención, ya que reciben conocimientos teóricos y prácticos para modelar y representar gráficamente los elementos de un videojuego.
¿Cómo transformar un hobby en una profesión? Los estudiantes deben realizar proyectos utilizando su mente creativa al delinear un guión y personajes. Luego, se centran en la elaboración física a través de la animación, iluminación y digitalización de fuentes o elementos digitales, utilizando softwares y otras herramientas.
Aunque la mayoría de los que entran a estudiar esta carrera son gamersdesde hace años, la malla curricular comienza desde lo más básico. “Se parte desde los inicios, desde cómo tomar el lápiz en las ilustraciones. Esto, porque hay que entender que el que te guste consumir videojuegos no necesariamente se va a traducir en que seas un buen profesional para crearlos. Hay un montón de procesos detrás que el usuario no ve. Por ejemplo, un segundo de animación pueden ser treinta dibujos y mucho más trabajo”, dice el Jefe de Carrera de Animación Digital y Diseño Videojuegos de la Universidad del Pacífico, Gonzalo Lara.
Un dinámico campo laboral
Desde hace años, la industria de los videojuegos obtiene más ganancias que el cine o la música. Por lo tanto, el campo laboral es cada vez más amplio y seguro. Empresas de diseño de videojuegos, empresas de animación y diseño digital, productoras y post productoras audiovisuales, agencias de publicidad y marketing, y la industria del entretenimiento, son solo algunos de los lugares donde se puede desempeñar el técnico a nivel superior.
En lugares donde la industria del videojuego está más desarrollada, los sueldos son bastante altos. De hecho, en la Novena Encuesta Anual de Salarios de la Industria de los Videojuegos realizada en 2010 en Estados Unidos y Canadá por la revista Game Developers Magazine, se indica que un director creativo puede ganar un promedio de 90.640 dólares anuales (más de 5 millones de pesos mensuales), un diseñador 61.859 dólares (cerca de 3,5 millones de pesos mensuales) y un programador junior con tres años de experiencia, un sueldo anual de 54.975 dólares (alrededor de 3 millones de pesos mensuales).
¿Y en Chile? “Hay tanta diversidad de empresas grandes, chicas, full videojuegos, variadas, nacionales, internacionales, que el rango es muy variable”, argumenta Lara. Sin embargo, complementa que hay variedad de opciones para ejercer la profesión. “La industria de los videojuegos en Chile da la opción de trabajar en las mismas empresas del gremio que se dedican a eso. También hay otras fuentes laborales, como las empresas híbridas, es decir, que parte de su oferta de valor es hacer un videojuego”, dice.
La carrera de Animación Digital y Diseño de Videojuegos promueve el uso de la tecnología en la construcción de nuevos mensajes comunicacionales en las plataformas actuales. “Hoy el videojuego no es sólo entretención, sino que también se puede hacer un videojuego con fines educativos, terapéuticos y/o para capacitación laboral. Hay un montón de tecnologías que se van integrando y van generando espacios. Hoy la principal fortaleza es que tú desde Chile puedes publicar usando las redes digitales (iTunes, Google Play), es decir, ya no tienes que ir allá para desarrollar tu proyecto y ni para publicar tu trabajo”, señala el jefe de la carrera en la Universidad del Pacífico.