El sexto mejor recinto de salud de Latinoamérica concretará a mediados de 2016 su traspaso a la organización estadounidense, que gana presencia. Para fines de año, esperan lograr pasar del nivel 6 al 7 en la calificación de Healthcare Information and Management Systems Society (HIMSS).
La palabra es management. El superintendente del Hospital Samaritano de Sao Paulo, Paulo Ishibashi, le da especial énfasis cuando describe la fórmula del éxito del recinto que, por años, ha resultado destacado entre los mejores de América Latina, según el ránking realizado por América Economía. "Nosotros estamos comprometidos con una disciplina de management. Tenemos información que revisamos en reuniones semanales, para seguir los números e indicadores y también los riesgos de la actividad. Yo diría que la administración de la información es un factor clave".
Ishibashi menciona que el management también está presente en la misión, visión y valores que rigen al recinto y que, entre otros, pone en un lugar privilegiado la seguridad de los pacientes. "Tener los valores del cuidado centrado en el paciente, la responsabilidad y la efectividad, ha ayudado", agrega el doctor.
El Hospital Samaritano de Sao Paulo, que en la última medición resultó ser el segundo mejor de Brasil y el sexto en Latinoamérica, acaba de dar un paso importante en su historia. Hace un mes se hizo público un contrato de compra por parte de la estadounidense UnitedHealth Group, dedicado al rubro de los seguros médicos, pero que ha fortalecido una presencia en la entrega de salud en el continente. El grupo ya controlaba Amil Participacoes, que opera decenas de hospitales y clínicas en Brasil.
La concreción de los planes de venta llegaría a mediados de 2016, un año en que el personal y administrativos del recinto también buscan continuar mejorando los estándares de calidad. Un objetivo claro es aumentar el nivel en la calificación de la Healthcare Information and Management Systems Society (HIMSS), para pasar del 6 actual a un 7.
Entre las estrategias de éxito del Samaritano, está la comunicación constante. El jefe médico del recinto, Darío Ferreira, manifiesta que "tenemos un núcleo para la seguridad del paciente que hace una revisión mensual. Regularmente monitoreamos y comparamos nuestros indicadores con los de otros hospitales en brasil. Además, cada vez que implementamos un protocolo nuevo hacemos entrenamientos multiprofesionales, para todos los departamentos".
A ello, se suman las vías de comunicación constante con los mandos medios y los profesionales de la salud. El Samaritano, uno de los fundadores de la Asociación Nacional de Hospitales Privados de Brasil (ANAHP), expone estas estrategias en los foros y simposios que la institución organiza regularmente en el país.
Ese aporte a la cultura de la administración hospitalaria en el país, cuyo sector público sufre una crisis de financiamiento, espera mantenerse vigente con la entrada de UnitedHealth, cuyo giro hacia la provisión de servicios de salud podría explicarse en parte por la caída en el negocio de los seguros, debido al delicado momento económico de la nación más poblada de América Latina.