Sistema implementado en un hospital canadiense tiene por objetivo mejorar los resultados en salud a través del intercambio de información entre profesionales y recintos.
Una mujer de 80 años que espera una cirugía en su rodilla llega a un hospital con síntomas de falla cardíaca. Su situación mejora, los exámenes resultan negativos y es despachada rápidamente. No obstante, días antes de su cirugía, su proveedor de salud primaria no ha recibido un reporte de lo que ocurrió y, cuando lo hace, el informe es inexacto.
Es un escenario común, incluso para un país desarrollado como Canadá, donde el hospital Markham Stouffville Hospital desarrolló un sistema para evitar las fallas de comunicación en la cadena de salud. Profesionales y administrativos del recinto desarrollaron un sistema llamado Improving and Driving Excellence Across Sectors (IDEAS), que se implementó a finales de 2014.
El principal objetivo del sistema era que en abril de este año, al menos el 75% de los pacientes despachados tuvieran un resumen completo y comprensible de su estado de salud disponible en su recinto de atención primaria dentro de las primeras 48 horas desde que fueron dados de alta.
"La meta era tener un reporte legible en la oficina del médico familiar, virtual o no, dentro de los dos primeros días, para mejorar la transferencia del cuidado", manifestó el director de emergencias del recinto, Paul Cappuccio.
El objetivo final era generar una relación amplia con proveedores de salud primaria para mejorar la calidad del cuidado. Para ello, se realizó una encuesta entre los proveedores del servicio, que mostró que más del 95% de los profesionales valoraron positivamente la entrega de información oportuna desde el hospital.
"La capacidad de despachar electrónicamente los resúmenes del estado de salud fue imperativo para relacionarnos con la atención primaria de manera oportuna y significativa", dijo la directora de servicios médicos del hospital, Julie Sullivan, quien agregó que "la aplicación de registros de salud electrónicos fue primordial para asegurarnos de tener éxito".
Para ello, además, fue necesario asegurar una transición efectiva de los profesionales hacia el uso de registros electrónicos. Un equipo del hospital fue el encargado de asegurar que se realizara un cambio conductual de los trabajadores de la salud.
Un seguimiento de los resultados del modelo demostró que la entrega de resúmenes se redujo en un 94,6% y que el 86,7% de los registros se entregó a la atención primaria dentro de las primeras 48 horas.
El hospital incluyó el modelo dentro de su Plan de Mejoramiento de la Calidad y monitoreará los resultados cada tres meses. Además, se busca extender la práctica dentro de la organización.