Se podrá implementar hasta en 30 mil centros de salud. La Historia Clínica Electrónica servirá para una mejor toma de decisiones y será una herramienta de ayuda para rastrear la vacuna contra el COVID-19.
Luego de casi seis meses de investigación, un equipo de médicos e ingenieros peruanos ha implementado un sistema de registro clínico completamente digital o también denominado Historia Clínica Electrónica para la identificación, triaje, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de pacientes con covid-19.
Este proyecto obtuvo financiamiento en la primera convocatoria del concurso "Proyectos Especiales: Respuesta al COVID-19" del Concytec, y es liderado por el doctor Ciro Mestas Valero del Seguro Integral de Salud (SIS), como entidad solicitante.
En diálogo con la agencia Andina, el Dr. Mestas explica que la importancia de este sistema se centra en los datos reales, los cuales son tomados en el lugar de la atención del paciente con COVID-19 ya sea en emergencia, en la cama de hospitalización o en la Unidad de Cuidados Intensivos, y se registran directamente en el sistema, sin transcripciones, eliminando los errores y sesgos en la información.
“Toda esa data registrada en la Historia Clínica Electrónica servirá para una mejor toma de decisiones y será una herramienta de ayuda para rastrear, por ejemplo, la vacuna contra el COVID-19 que llegará a nuestro país”, señala.
El investigador agrega que los datos registrados se envían hasta un tablero de control a nivel nacional, “el Global Health Barometer”, que recibe en tiempo real toda la información, con codificación de datos en estándares internacionales de interoperabilidad en salud.
Este tablero ofrece información consolidada nacional y se podrá saber, por ejemplo, cuántas personas están contagiadas, enfermas, hospitalizadas o murieron a causa del COVID-19 en el país, entre otros resultados.
Una de las ventajas de este sistema es que el registro permite eliminar al papel como fuente de contagio mientras que las historias clínicas en físico irían desapareciendo.
“Además esta herramienta automatizada con inteligencia artificial ayuda en la decisión del médico, por ejemplo, al rellenar los campos de síntomas del paciente (como tos, fiebre o quejas respiratorias). El sistema automáticamente le indica al especialista si es paciente sospechoso de COVID-19, si necesita una prueba de descarte o si debe estar en cuarentena, de acuerdo a los síntomas que se va digitando”, precisa.
Asimismo, la Historia Clínica Electrónica tiene un módulo de teleconsulta para dar seguimiento a los pacientes con COVID-19 que se encuentran en zonas alejadas del país.
El proyecto es posible gracias al apoyo de la Cooperación Técnica Belga que ya contaba con un sistema completo de gestión hospitalaria digital desde la herramienta OpenClinic de la Universidad Libre de Bruselas. Lo que hicieron los ingenieros peruanos es incorporarle un módulo de Historia Clínica Electrónica específica para el triaje, atención y seguimiento de pacientes con COVID-19.
Libre acceso y sin costo
La plataforma OpenClinic es de código abierto, por lo que no requiere un pago de costosas de licencias y su implementación solo depende de la capacitación del personal y de recursos mínimos en equipamiento informático debido a que funciona en celulares, tabletas o PC.
Actualmente la Historia Clínica Electrónica esta siendo implementado en cuatro centros de salud de Cusco, entre ellos el Hospital Antonio Lorena que está brindando información en tiempo real sobre los pacientes COVID-19 de la región.
Por su parte, la Marina de Guerra del Perú también ha usado la herramienta OpenClinic en las Plataformas Itinerantes de Acción Social. "Este software tiene un encriptamiento de datos muy potente, es ético y la confidencialidad en el acto médico es fundamental y eso esta garantizado aquí”, enfatiza.
El Dr. Mestas señala que el principal objetivo es desplegar un sistema digital de información en salud en todo el país con un costo mínimo y que puede llegar hasta 30 mil establecimientos de salud.
“Estamos alcanzado el objetivo de probar un prototipo de registro clínico en el punto de atención. Es una necesidad de hace mucho tiempo y que ahora está a disposición del sistema nacional de salud. Comparto un agradecimiento a los que han participado en este proyecto desde médicos, enfermeras, técnicos e ingenieros. Varios se contagiaron y, a pesar de todo eso, lo hemos logrado y estos son los resultados", finaliza el investigador peruano.