El Centro Médico Infantil de Shanghai practica cada año más de 3.700 intervenciones cardíacas a niños, cifra que la sitúa en primer lugar entre todas las instituciones médicas del mundo.
Ma Chengqiang, de 16 años, y Yang Youhong, un bebé de 8 meses, ambos de la provincia noroccidental china de Qinghai, han salvado la vida tras ser operados del corazón en la metrópoli oriental de Shanghai gracias a los avances de la tecnología de impresión en tres dimensiones.
"Hemos tenido la fortuna de que en las operaciones se emplease una cirugía con la tecnología de impresión en tres dimensiones más reciente del mundo. Además, el precio incluía los costes de traslado, alojamiento, diagnóstico y tratamiento. Estamos muy agradecidos", indicó Ma Wenming, abuelo de Ma Chengqiang.
Los dos menores se encuentran entre los favorecidos por un proyecto benéfico entre China y Bélgica iniciado en abril por el Centro Médico Infantil de Shanghai y la compañía de bélgica Materialise NV, uno de los mayores proveedores de software y servicios de impresión en tres dimensiones del mundo.
El proyecto ofrece tratamiento gratuito, especialmente con tecnología de impresión en tres dimensiones, a los niños diagnosticados con cardiopatías congénitas en las regiones subdesarrolladas del oeste de China, indicó Ji Qingying, subdirectora del centro médico.
La clínica shanghainesa practica cada año más de 3.700 intervenciones cardíacas a niños de todo el país, cifra que la sitúa en primer lugar entre todas las instituciones médicas del mundo. Las operaciones de corazón cuestan generalmente entre 80.000 y 100.000 yuanes (de US$ 11.600 a US$ 14.500).
El proyecto prevé realizar entre 15 y 20 intervenciones cardíacas al año con aparatos de la impresión en tres dimensiones.