Por Juan Manuel Gómez, Regional Sales Manager para la región Sur de Latinoamérica de Citrix.

El impulso a la telesalud permite que un mayor número de instituciones médicas y sus pacientes puedan beneficiarse de un mejor servicio, dando un paso grande al desarrollo de esta área en toda Latinoamérica. En Chile, con un cambio demográfico que apunta a una población envejecida y la inminente convivencia con enfermedades crónicas, sumado al colapso constante de hospitales públicos; la tecnologización en la salud, más que una acción de vanguardia, representa una urgencia en el sector.

Dentro de la Agenda Digital impulsada por el actual Gobierno, el proyecto SIDRA 2.0 fomenta desde el área de la salud contar con un registro clínico electrónico en el total de los establecimientos al año 2020. Aquí, la conectividad presenta un gran desafío en lograr las condiciones para el fortalecimiento y modernización de la red asistencial, ya que va de la mano de la digitalización y virtualización los historiales clínicos de las personas.

En este escenario, la movilidad es clave para un mejor proceso hospitalario. Ésta, impulsada por la virtualización permite implementar avances en varios países del mundo y proporciona a los médicos un ingreso mucho más fácil, rápido y actualizado a información importante de sus pacientes por medio de distintos dispositivos móviles, para tomar decisiones en tiempo real, minuto a minuto. Gracias a la virtualización los datos nunca quedan almacenados en los equipos en los cuales fueron revisados, ya que siempre estarán seguros y centralizados en el centro de datos.

Una vez que los hospitales y clínicas cuenten con una infraestructura y conectividad más sólidas, se podrán tomar decisiones avanzadas en telesalud, ya que será posible implementar historias clínicas digitales e impulsar la movilidad para el cuerpo médico, conectando sus dispositivos a Internet, lo que además se traducirá en una de las claves para mejorar el proceso hospitalario por medio de una reducción considerable de los tiempos de espera para la atención de las personas.

El impulso de la tecnología en la medicina no solo permite aumentar la cobertura en el área de la salud, sino que también posibilita la llegada de ésta a lugares más remotos, aumentando el alcance de sus beneficios. Asimismo, esto da paso a la consagración del internet de las cosas que permitirá el ingreso de nuevos actores y productos al sector, que sin lugar a dudas entregará soluciones más innovadoras y más productivas a las nuevas generaciones, optimizando así el oficio de salvar vidas.