A la India no le conviene la estrategia económica de Chine, porque incluye Pakistán.

La India sigue renuente a participar en la Nueva Ruta de la Seda, declaró el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores indio, Ravish Kumar.

"Saben por qué nos oponemos a ese proyecto, consideramos que estas iniciativas se deben realizar conforme a reconocidas normas internacionales, con una gestión eficaz y bajo la supremacía de la ley y la transparencia, se deben llevar a cabo de modo que no infrinjan la integridad territorial y la soberanía de ningún país", dijo el portavoz en una rueda de prensa.

A la vez subrayó que la India saluda cualquier esfuerzo que esté dirigido a disipar sus "preocupaciones legítimas" sobre el asunto.

Un periódico Hindu publicó días atrás que el consejero de Estado de China, Yang Jiechi, planea proponer a la India unirse a la Nueva Ruta de la Seda durante una reunión con su par indio, Ajit Doval, sobre la cuestión fronteriza que se celebrará el 22 de diciembre en Nueva Delhi.

En 2013 China promovió la iniciativa 'Un cinturón, una ruta' que busca construir una red de infraestructuras y comunicaciones y crear una plataforma de cooperación económica que conecte a decenas países de Asia, Europa y África reeditando las antiguas vías comerciales de la Ruta de la Seda.

Se trata de la creación de un corredor comercial para promover exportaciones directas de Oriente a Occidente con preferencias.

A la India no le conviene la estrategia porque uno de los proyectos principales de la infraestructura en el marco de la iniciativa es el Corredor económico chino-pakistaní que estipula que China y Pakistán lleven a cabo actividades económicas en la región de Gilgit-Baltistán que forma parte de Cachemira, una zona disputada por la India y Pakistán.