El gerente general de Nanotec Chile dice que aunque en el país existen empresas, buena situación económica, investigadores, incentivos e ideas, faltan las ganas, y eso se traduce en cultura de innovación. A continuación, Patricio Jarpa refiere sobre las ventajas de la innovación abierta y lo que falta para mejorar.
La innovación abierta parece estar llegando poco a poco a Chile en busca de mejorar procesos, servicios y productos. No son pocas las empresas que han comenzado a incursionar en la innovación abierta mediante concursos o alianzas con aceleradoras o startups directamente.
De acuerdo a Patricio Jarpa, gerente general de Nanotec Chile, aunque en el país existen empresas, buena situación económica, investigadores, buenos incentivos e ideas, "faltan las ganas, eso se traduce en cultura de innovación".
Para conocer más sobre su visión, reproducimos la entrevista con Patricio Jarpa.
-¿Existe confusión entre los empresario sobre qué es y no innovación? En ese sentido, ¿qué errores se suelen cometer?
Hay confusión y poco tiempo. En Chile trabajamos mal y no damos importancia a competir con innovación. Somos cómodos, preferimos copiar que innovar, y eso no nos saca del hoyo. En general, los empresarios prefieren invertir en otros activos y no en sus propias innovaciones. Creen que otro lo puede hacer por ellos y este es el principal error, he visto empresas contratar servicios para realizar una innovación cuando son los propios los que deben realizarlo, pues nadie mejor conoce el negocio.
- ¿Existe falta de liderazgo capacitado para hacerse cargo de innovación abierta en el país? ¿De qué forma se puede trabajar esto?
Ese es un punto más macro. A mi juicio, más allá de la cultura de la empresa por mejorar en su propia innovación, falta un liderazgo de país para incentivar aún más la innovación donde más nos duele, pensando en un país de commodities que además está al debe en energía.
Falta liderazgo para pensar en los próximos 30 ó 50 años, con un objetivo país claro más allá de los cortos turnos de gobierno.
- ¿Qué tipo de organizaciones están mejor preparadas en Chile para adoptar este sistema de innovación?
En general, aquellas que sí tienen una bien montado área o departamento de I+D+i, y que además ofrezcan incentivos locales y tengan presupuesto para ello. No son muchas, pero cada vez hay más. Hace 20 años casi no existía el cargo de I+D.
- ¿En qué clase de organizaciones es necesario aplicar innovación abierta y cómo hacerlo?
Puede ser cualquiera, incluso de servicio, pero es preferible aquellas de industria productivas, pues generan más valor agregado al país.
-¿Qué puede estar detrás de una escasa o nula aplicación de innovación abierta en el país? ¿Cuáles son los principales causantes de esto?
Los últimos meses ha habido más incertidumbre de lo normal en el escenario político económico, y eso deja al empresario con el foco en suma 0. Pero es un tema pasajero y de prioridades lógicas.
-¿Cómo revertir la escasa aplicación de Innovación abierta en Chile?
Mayor promoción, eso es por parte del gobierno.
- ¿Por qué Chile no evoluciona en I-D?
En Chile esto solo significa un fracaso y una penosa deuda que tendremos con las futuras generaciones. Como se ha señalado, técnicamente seguimos en el último lugar en I+D en el ranking OCDE. Una vergüenza, pues nos superan países que nunca fueron más activos en crecimiento que Chile. Revertir la situación puede ser en una década. No es de un año para otro.
Para tener un análisis global no solo hay que comparar, de hecho, podría ser un error, pero sí está claro que no tenemos el ADN de investigación y desarrollo. Si bien Chile ha sido líder en crecimiento en algunos períodos es más que nada gracias a sus commodities, como el cobre. Pero ningún país vive de commodities eternamente, y por eso mismo es que hace 10 años debimos haber comenzado el camino en I+D+I, con un alto grado en innovación, más aún con el conocido caso del salitre. Chile en los grandes números es solo minería, con un claro problema en su matriz energética y poca explotación de sus recursos naturales.
-¿Qué nos falta? Corfo se ha preocupado de tener programas adecuados, Conicyt de becar a profesionales y las universidades de formarlos. Por su lado, los empresarios están siempre atentos a cualquier oportunidad
Mirado desde el punto de vista de una empresa dedicada a la innovación, lo que falta son dos grandes factores: cultura generalizada de innovar y hacer I+D, en nuestro caso ya no se podría hacer por educación, debiera ser por obligación. Ya es tarde para que nos eduquen en este sentido, cada entidad debiera realizar esta actividad de manera obligatoria y tener sus recompensas adecuadas,. Para eso hay una lista enorme en poner incentivos. Un caso notable es Israel (primero en el ranking con 4,3% del PIB), pero a diferencia de Chile, Israel es un país que se educó con esta formación dado su necesidad regional que los hizo un pueblo constantemente atento a escases de suministro y desarrollo en defensa. Pero fueron inteligentes, desarrollaron tecnología hasta ser autosuficientes.
Y lo segundo, es que Chile no tiene un líder en innovación. Nuestro sistema político social depende mucho de los gobiernos de turno y sus liderazgos. Liderazgos que son constantemente atacados por situaciones políticas anexas y críticas partidistas reflejadas en encuestas con alto impacto comunicacional. Esto hace que uno de los pilares de la innovación, los empresarios, vea escenarios políticos inestables y entre otras cosas, sean contrarios a destinar recursos a invertir, y la innovación es inversión.
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