Por Alfredo Almerares, Physician Executive de InterSystems.

Chile es un referente en la salud de la región. En gran parte esto se debe desde hace varios años lidera la transformación digital esta área. El “Modelo Chileno” es observado por varios países y busca ser replicado. Pero no solo por el porcentaje de implementación de tecnología en la materia, sino que también por cómo se ha utilizado y cómo se está logrando valor en su aplicación, como es el caso del Servicio de Salud de Talcahuano y sus dashboards de gestión.

¿Cuál es la hoja de ruta que nos queda seguir para continuar avanzando? Los principales desafíos para una interoperabilidad en salud efectiva y real en Chile, se centran en la definición de estándares de intercambio de información y modelaje de datos, que permitan la interconexión efectiva y real de los sistemas digitales presentes en las diversas instituciones del sistema de salud nacional.

Al aplicar estos estándares en la interoperabilidad en salud, se logra reducir la segmentación y fragmentación de la información de los sistemas utilizado en la gestión administrativa y/o clínica de diferentes centros asistenciales, permitiendo trabajar de manera efectiva en cualquier centro asistencia, para concretar la llamada slud conectada.

Esta estandarización de datos y sistemas, no sólo permitirá que los prestadores de salud generen procesos más rápidos y eficientes, sino que podrán canalizar sus recursos en lo que realmente importa: una atención más oportuna, eficiente e inclusiva de los pacientes.

Como mencionaba anteriormente, Chile es uno de los líderes en la digitalización de la salud, pero aún existe la capacidad de expansión y fortalecimiento en esta materia. Por lo mismo, una interoperabilidad real y efectiva debiese ser el foco a considerar en las políticas públicas durante los próximos años, porque es donde realmente la tecnología puede hacer una diferencia en lo más importante que existe en materia sanitaria: una atención de calidad y oportuna. Para ello, es clave que los clínicos y equipos de salud puedan acceder  información clínica completa de sus pacientes, porque simplemente no se puede atender de manera efectiva y correcta a quien no se conoce.

Hoy Chile demuestra que el gobierno, los servicios de salud, hospitales públicos, clínicas y empresas tecnológicas están trabajando juntos, coordinados y como aliados en esta tarea. Esa el la clave para lograr el éxito de las implementaciones de tecnología de la información en el área y acercar el beneficio de éstas a los médicos y pacientes en busca de una real una salud conectada en nuestro país.