El descubrimiento fue posible gracias a las investigaciones sobre una proteína producida naturalmente por el cerebro llamada TGF beta 1.

Investigadores brasileños lograron interrumpir la extensión del alzheimer en animales, que recuperaron la memoria más reciente, según informaron medios locales.

El descubrimiento, que puede significar un gran avance en la medicina para la humanidad, fue posible gracias a las investigaciones sobre una proteína producida naturalmente por el cerebro llamada TGF beta 1, según divulgó el portal G1.

Los científicos, miembros de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), descubrieron la importancia que tiene la citada sustancia para mantener los circuitos eléctricos del cerebro y cuya producción se reduce en los ancianos, lo que genera una serie de inflamaciones que interrumpen la conexión entre las neuronas.

Según los investigadores, cuando se aplica la proteína TGF beta 1 a las células del cerebro afectadas por el alzheimer, estas se recuperan. En el caso de los animales analizados, recuperaron su memoria más reciente.

En un experimento que hace parte del estudio, un ratón con alzheimer es colocado delante de dos objetos iguales y no consigue reaccionar cuando uno de los objetos es sustituido, aunque cuando se le inyecta la TGF beta 1, el ratón se acuerda del objeto que no ha sido cambiado y reacciona ante el nuevo, es decir, ante el que no conocía con anterioridad.

El alzheimer es una enfermedad que afecta a más de un millón de brasileños y es el principal factor de demencia en las personas de la tercera edad.