Proyecto de la JICA iniciará en abril de 2018 con una duración de 5 años.
El Instituto chileno de Fomento Pesquero (IFOP) ha firmado dos importantes proyectos con Japón y Australia para el estudio de las mareas rojas.
Según ha informado la institución, el acuerdo con Japón se ha realizado a través de la Agencia de Cooperación Internacional (JICA) y la Agencia de Ciencia y Tecnología (JST) que financiaran un estudio que se realizará en conjunto con las Universidades de Kyoto y Okayama, además del Instituto Nacional de Investigación en Ciencias de las Pesquerías.
Con Australia, la colaboración se realizará con CSIRO-Chile (Organización de Investigación Científica e Industrial de la mancomunidad del Reino Unido) que promueve la colaboración entre Chile y Australia para entregar investigación aplicada de clase mundial en las áreas minera, marino costero, gestión de agua.
Esta cooperación servirá para financiar dos estudios que persiguen mejorar las capacidades del país para enfrentar eventos nocivos, que ha nivel global han mostrado en los últimos 50 años haber incrementado en frecuencia, cobertura geográfica e intensidad.
Los proyectos se ejecutarán desde el recientemente inaugurado en Puerto Montt, al sur del país, Centro de Estudios de Algas Nocivas (CREAN), dependiente de la División de Investigación en Acuicultura.
En enero de 2018 se dará inicio al estudio “Programa de manejo y monitoreo de las floraciones algales nocivas y toxinas marinas en el océano Pacífico desde Biobío a Aysen (I etapa)”, con objeto de disponer de información oportuna y confiable para proteger la salud pública y minimizar los impactos asociados a eventos de marea roja.
Otro de los estudios en los que se va a trabajar desde el CREAN es el de “Desarrollo de métodos de monitoreo y un sistema de pronóstico de las floraciones algales nocivas para una acuicultura costera sustentable en Chile”, que está financiado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA) y la Agencia de Ciencia y Tecnología (JST) de este país.
Este proyecto dará inicio en abril de 2018 y tiene una duración de 5 años.
El producto central de este estudio será la instalación de una técnica de biología molecular que permita identificar in situ, los tipos de especies de fitoplancton tóxicas que generan marea roja. Este estudio se realiza en conjunto por parte de Japón con las Universidades de Kyoto y Okayama, además del Instituto Nacional de Investigación en Ciencias de las Pesquerías, y por la parte chilena, con la Universidad de Antofagasta, Universidad de la Frontera y Universidad de Los Lagos”.